De lateral a lateral

De lateral a lateral

Ernesto Valverde era un extremo de los de antes. Un futbolista de carril que desarrollaba su juego en paralelo a la línea de cal, abriendo el capo, estirando del rival hacia el banderín y surtiendo de centros el interior del área. Por eso resulta curioso que a lo largo de su andadura en los banquillos, pocas veces haya recurrido a versiones actuales de lo que él fue. A los atacantes que empiezan en los costados, los prefiere terminando por dentro, y que sean los laterales quienes se encargan de ocupar las orillas una vez el equipo alcanza el último tercio del campo. Quiere que sean ellos los verdaderos hombres de banda. Los que esta temporada tiene a sus órdenes en el Barça producen como tal, encaramados ambos a los primeros puestos de la clasificación de máximos asistentes de La Liga. Jordi Alba y Sergi Roberto fueron de nuevo, ayer, dos figuras estrechamente relacionadas con la victoria azulgrana, tanto por su intervención directa en los dos primeros goles, como por su relevancia para que los locales edificaran un escenario de juego que les fuera favorable. Ni el más que correcto desempeño del Levante, ni las alteraciones en el once culé, fueron un impedimento para el líder.

– A la izquierda la soledad de paulinho en el segundo peldaño, y a la derecha la triple mediapunta que dibujaron Dembélé, Messi y Andrés Iniesta. –

De inicio optó El Txingurri por recuperar el esquema con el que comenzó el campeonato, esto es un 1-4-3-3 con un único atacante exterior situado en banda derecha, y tanto Messi como Luis Suárez ubicados en el carril central. Además, el extremo, papel que en esta ocasión recayó en el regresado Dembélé no mantuvo una actitud fija de sujeción, sino que se implicó en un constante intercambio con el interior y el lateral con los que compartió el perfil derecho. Tan habitual resultó identificar a Dembélé a la espalda del miembro del trivote levantinista más ladeado hacia su banda, que ver a Paulinho tomando por momentos aspecto de segundo pivote, o detectar a Sergi Roberto a la vera de Ivan Rakitic cerca del círculo central. La medular blaugrana, sin Busquets, le otorgó al croata la zona del 5 y a Paulinho la del interior derecho, siendo la suya, quizá, la mezcla menos exitosa de la tarde. La pareja que suelen formar Busi y Rakitic en la base de la jugada culé, en parte se define por el peso que ambos asumen en relación con el cuero, ya sea a la hora del desplazamiento o de asegurar su control. Paulinho no es ese tipo de jugador, y extirpado del once el cuarto centrocampista, por momentos el partido reclamó al brasileño en unas tareas que le son mucho menos afines que las que lo empujan hacia el área contraria. Como además resultó frecuente que Ivan descendiera un peldaño situándose entre centrales, y que Iniesta lo subiera para conquistar la espalda de su par, en las jugadas en las que el reparto de banda llevaba a Dembélé al centro y a Sergi Roberto a la cal, toda la segunda altura quedó en manos de Paulinho, lo cual generó a los locales alguna dificultad en el avance.

-Dembélé interiorizando su posición, los mapas del francés (arriba) y Messi (abajo) y Sergi Roberto participando por dentro. (mapas vía squawka.com)-

El Levante no quería meterse atrás, y aguantaba la línea de medios a cierta distancia de su portería, con tal de acercar el robo a Boateng y que el trabajo de éste contra los centrales del Barça regalara tiempo a Jason, Ivi, Lerma y Doukouré para acercarse a la de Ter Stegen. No obstante, poco a poco y con el paso de los minutos, los de Valverde fueron descubriendo fórmulas para lograr su objetivo. A nivel individual el principal fue Leo Messi, que reclamado por las dificultades de Paulinho a la hora de conectar, y encontrando apoyos y espacios en los intercambios entre Sergi Roberto y Dembélé, se aproximó a la zona del interior derecho para recibir, girarse y cortar al sistema defensivo visitante ya fuera conduciendo el balón o sirviéndolo con un pase cruzado. Con la diagonal hacia Jordi Alba como relación fetiche, a partir de la cual profundizar y adelantar las líneas después del pase atrás, mostró Leo las interesantes posibilidades que frente al equipo de Muñiz podían esconder los balones cruzados. Sobre todo los buscaron Mascherano y Rakitic, como una forma de activar los costados en una posición adelantada, y que desde zonas escoradas el balón pudiera regresar al centro con superioridad para el resto de piezas. Combinando y juntando primero en la derecha para aclarar el horizonte en la izquierda. De lateral a lateral.

– De izquierda a derecha, los pases de Mascherano, Rakitic, Jordi Alba y Sergi Roberto contra el Levante. (vía squawka.com) –

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– Foto: Alex Caparros/Getty Images

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