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Los tres nueves de Eusebio

Donde más ha rotado esta temporada Eusebio Sacristán ha sido en la delantera. Pese al movimiento de piezas, seguramente uno de los grandes éxitos del técnico es haber conseguido que, prácticamente siempre, la tripleta atacante produjera. A comparación de otras temporadas, ha sido el gran paso adelante del filial. Generar ventajas desde la línea más adelantada sin que estas nacieran únicamente de una aportación estrictamente individual. Arriba ha habido plan. La idea con la que se empezó el curso era jugar con dos extremos y un delantero centro. Dongou y dos hombres de banda que, con todos los matices y diferencias que se quieran, eran delanteros. Joan Román uno y Dani Nieto el otro. Por detrás dos mediapuntas haciendo de interiores a escoger entre Espinosa, Denis Suárez y Edu Bedia. Así empezó la temporada el Barça B.

Los resultados fueron torciéndose y Eusebio tocó donde más podía tocar, y finalmente encontró la solución tras cambiar a dos de los tres protagonista arriba. Desde el juvenil ascendió Sanabria que se situó en el centro y mandó a Dongou al lado derecho, pero el movimiento clave fue adelantar la posición de Denis Suárez. Pasó a jugar de extremo izquierdo, con tendencia a relacionarse con la media y a sumar por dentro y, al mismo tiempo, manteniendo la amenaza exterior. Salió Sanabria en enero, y una vez realizado el intento con Suárez en el papel de falso nueve, y tras darle algunos partidos a Adama en la derecha para permitirle a Dongou recuperar el centro, la temporada terminará con el tercer nueve distinto.

De Dongou a Sanabria y de Sanabria a Sandro Ramírez para que Jean Marie siga en la derecha. El camerunés busca el área, Suárez la frontal, y el canario el desmarque. Los movimientos encajan. Existe la movilidad para que los dos teóricos hombres de banda puedan terminar por dentro. Eusebio no ha dejado de coquetear con el falso nueve, que parece ser una formula que le gusta, y no son anecdóticas las fases de juego en que tanto Sandro como Dongou se abren para buscar el fuera-dentro con Denis revoloteando entre líneas. Ante el nuevo tridente atacante y el devastador recurso que supone Adama, el gran damnificado ha resultado ser Dani Nieto. Mientras tanto, desde abajo aprieta Munir. Si la temporada en Segunda durase diez jornadas más, seguramente a este artículo habría que añadirle un cuarto párrafo. Todo apunta a que no habrá que esperar demasiado: será en la 2014-15.

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