
Se espera mucho de la selección de Pekerman en este Mundial, que ha juntado un grupo de futbolistas de lo más estimulante y que hace inevitable que nos acordemos de la Colombia de Maturana. Esta tiene a James Rodríguez, Quintero, Cuadrado o Zuñiga, aquella a Valderrama, Higuita o Freddy Rincón, y como a la actual, tampoco le faltaba el delantero centro. Fuerte en el apoyo, veloz en el desmarque, involucrado en el juego y con una especial habilidad para mantener el balón pegado al pie, Faustino Asprilla era el punta encargado de concretar, un carismático delantero que vivió sus noches más felices goleando a Argentina y al Barça de Louis Van Gaal. Una con la camiseta de la selección y la otra con la del Newcastle. El 17 de septiembre de 1997, el conjunto inglés se enfrentaba a los culés en la perimera jornada de la fase de grupos de la Champions League. Un hattrick, nada más y nada menos, le endosó Tino a un equipo azulgrana que aquella noche saltó al césped de St James’ Park con una aliniación un tanto extraña. Por delante de Ruud Hesp, una defensa en la que Reiziguer y Sergi ocupaban las bandas y un reconvertido Celades hacía pareja de centrales con Miquel Ángel Nadal, una línea de tres centrocampistas con Iván De la Peña como «cierre», Luis Enrique en el interior derecho y un casi recién aterrizado Rivaldo en el izquierdo, y arriba una delantera que integraban, de derecha a izquierda, Luis Figo, Sonny Anderson y Amunike. En el segundo tiempo también participaron Dragan Ciric y Dugarry.
22 minutos necesitó el colombiano para poner por delante a su equipo tras transformar un penalty que él mismo provocó, y 49 para dibujar en el luminoso un 3-0 con dos testarazos a centros de Gillespie desde la derecha. Y a punto estuvo de firmar un cuarto de idéntica factura. Luis Enrique primero y Figo ya sin tiempo para más, recortaron distancias, pero los tres puntos se quedaron en Inglaterra, en lo que fue la primera piedra de una prematura eliminación azulgrana y una de las noches más recordadas en la carrera del colombiano Asprilla. Una noche a la que tratará de acercarse hoy el sustituto de Falcao, para que Colombia, aún sabiendo que ha perdido a su estrella, no sienta que ha perdido, también, a su delantero centro.
