El técnico catalán sabe por experiencia propia que ante el United de Ferdinand, Vidic y Carrick, ganar la espalda del mediocentro es conquistar gran parte del botín. Sin mediapunta que lo hiciese, mandó ahí a los dos extremos, la defensa rival se cerro hacia dentro y regaló la posibilidad a Alaba y Rafinha de un centro que caería en la misma área donde esperaban las cabezas de Fellaini, Vidic, Ferdinand y Phil Jones. En el Allianz la película será otra, y las ausencias de Schweinsteiger y Javi Martínez no harán más que allanar la decisión. Jugará Mario Götze. Veremos si mediapunta del 4-2-3-1 o interior en el 4-3-3, el 19 será esa línea de pase constante, esa referencia difusa a la espalda de Carrick y su acompañante. El jugador que no dé tiempo a llegar ni a unos ni a otros.
Lo que también hacen las ausencias por sanción de Bastian y Javitxu es minimizar las opciones de que Lahm vuelva al lateral. De hecho prácticamente lo descartan. No es que de estar disponibles le diéramos más opciones a Philipp como zaguero que en la media, pero sí que viendo como se desarolló el guión en Manchester, era un recurso que Guardiola podía contemplar. Si las bandas iban a quedar vacías, encontrar también en Lahm lo que en la ida sólo encontró en Alaba. También pesaran las ausencias a la hora de controlar a la estrella visitante. Rooney será medio United y para serlo lo tendrá que ser por detrás del punta. Bastian y Javi Martínez, el doble pivote campeón de Europa, son los dos centrocampistas más preparados del Bayern para defender sin balón, y sin ellos Wayne puede gozar de mayor libertad. Si no es el mejor futbolista de los 22 que se juntarán en el campo, poco le falta, y sobre todo si como en la ida Moyes le da minutos a su sociedad con Kagawa, en él puede albergar esperanzas el United. Las pocas que pueda tener.
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