Más cerca del balón
Tras jornadas de línea continuadora, el pasado sábado el Barça B presentó varias novedades en su duelo con el Mirandés. De nombres y de idea. Respecto a lo primero, entraron en el once Diagne, Cámara, Joan Roman y Adama Traoré en el lugar de Gumbau, Halilovic, Munir y Sandro, y en cuanto a lo segundo, aunque se mantuvo el 4-3-3 que una semana atrás caía en el Mini, su propósito fue distinto. Si entonces se recurrió a él para ajustar las vigilancias en banda sobre un rival con carrileros, el sábado recuperó la misión de permitirle al equipo una organización más eficaz para pasarse el balón. Así pues, el filial blaugrana ofreció una de sus caras más asociativas desde que lo entrena Jordi Vinyals, creciendo en la combinación desde un perfil izquierdo en el que se juntaban Grimaldo, Samper, Cámara y Joan Roman, para desahogar hacia el derecho de Adama después de haberle generado el espacio. El extremo derecho culé, estuvo activo y especialmente desequilibrante, con varios rivales cerca pero con metros por delante en los que practicar el slalom. Con Palencia desdoblándole por fuera y Patric como interior presto para guardarle las espaldas y hacerle el trabajo sucio, fue por su sector que llegaron las primeras ocasiones del Barça B y el gol inicial de Juan Cámara, rellenando desde segunda línea ese espacio que con Dongou y sin acompañantes con instinto arriba a veces corre el riesgo de quedar vacío.
Además, formaba de inicio Joan Román, que maneja una relación entre titularidades y puntos logrados por su equipo de impresión. No es tanto que el de Reus sea en estas un jugador especialmente destacado ni que con alguna acción determinante decida en favor de los suyos el resultado final, sino que con él en posición de extremo izquierdo el Barça B encuentra lo que más le ha faltado esta temporada: una ruta de juego. Más que el jugador, le favorece lo que evoca, ya que su perfil ahí es similar al que la temporada pasada desarrollo Denis Suárez, clave en el funcionamiento del atractivo Barça B que terminaría tercero el curso pasado. Varios escalones por debajo del hoy jugador del Sevilla, la presencia de Roman activa un funcionamiento colectivo que funcionó, que los jugadores conocen y que en ningún momento de la temporada ha encontrado una alternativa que le sustituyera. Todo contribuyó a que la intención inicial de que el balón ganara peso en el discurso azulgrana respecto a los últimos precedentes se pudiera llevar a cabo. De hecho, tras ponerse por delante en el marcador, los de Vinyals no cedieron el control del esférico y replegaron como hacen últimamente, sino que pretendieron defenderse desde la posesión y a distancia de su portería. La defensa seguía sin ser sólida pero el juego la acechaba desde más lejos, y aunque poco a poco el cuadro local logró discutirle los porcentajes a los catalanes, tuvo que ser a balón parado como llegaran sus goles.
Alberto 19 mayo, 2015
Yo lo veo muy negro, contra el valladolid que nos humillo en la primera vuelta no creo que se gane.
Y grimaldo creo que esta lesionado y me parece practicamente el mejor jugador de la plantilla, mucha suerte tiene que haber