Jordi Alba y sus socios
El verano de 1993 Romario se incorporaba Barça de Johan Cruyff. El Dream Team empezaba a cambiar. Por la limitación de tres extranjeros en el once, Laudrup perdía peso, y cada vez más la defensa de tres se tornaba de cuatro con la entrada de Nadal en un rol de “medio-central”. La superioridad en la media era innegociable, así que el damnificado era uno de los atacantes. El 3-4-3 mutando hacia el 4-4-2. La banda derecha en ataque era para las llegadas desde atrás de Ferrer o Amor y la movilidad de Hristo, mientras que en la izquierdo la protagonista era la permuta de posiciones. Las posiciones de partida en ese perfil, situaban a Stoichkov decantado hacia la cal, Txiki como interior y el jóven Sergi Barjuán como lateral. Con el balón en juego, el búlgaro trazaba la diagonal hasta el interior del área -una zona que antaño le liberaba Laudrup y que ahora compartía con Romario-, Txiki se abría para ocupar esa banda ahora desocupada, y el velocísimo Sergi aparecía lanzado desde atrás proyectándose en ataque.
Todo eso lo veía Ronald Koeman que desde atrás era el comandante de ese equipo. Cuando el holandés llegó como técnico a Valencia, puso en practica algo parecido a lo propuesto por Johan más de diez años atrás, aunque a hora, en base al contraataque. Cuando el equipo defendiera, Villa quedaría abierto en banda izquierda, Silva se descolgaría casi como delantero centro, y Juan Mata se incrustaría en la media haciendo de interior. Tras la recuperación, Silva se acercaba a la media para contactar con el balón, Villa trazaba la diagonal hacia dentro a zona de remate y Mata aparecía en esa banda liberada por ‘el Guaje’. A Koeman sólo le faltó “su Sergi”. Era Jordi Alba, pero su momento aun tendría que esperar.
Ahora, tras sobresalir en el Valencia de Emery y destacar con la selección española en la Eurocopa que se disputa actualmente en Ucrania y Polonia, Jordi Alba regresa a F.C.Barcelona, de donde salió cuando aun era cadete. Llega ante la necesidad del equipo de reforzar el lateral izquierdo tras el hueco dejado por la enfermedad de Eric Abidal. Sin embargo Jordi no se parece demasiado a Abidal. Pocos laterales izquierdos de primer nivel se parecen al francés. Sino que puestos ha trazar paralelismos, Alba está más próximo a Dani Alves, o aun más, al madridista Fabio Coentrao. Sus comienzos fueron como extremo, es un lateral de marcada tendencia ofensiva y pese a eso, está cómodo conviviendo con las responsabilidades defensivas que requiere su nueva demarcación. No le disgusta defender. Es correoso, intenso, incansable y tenaz.
En lo que más se parece al lateral derecho azulgrana es en su capacidad física. Alba es capaz de repetir esfuerzos largos y continuados durante todo el partido. Es incansable. En el Barça, como le sucedió a Alves, además, tendrá que correr 60 metros en lugar de 90, pues lo habitual es que el conjunto azulgrana pase la mayoría del tiempo en campo contrario. Con defensa de 4, pues, es probable que veamos en muchos momentos al equipo proyectar simultáneamente a sus dos laterales. En este sentido veremos si Tito Vilanova rehusa cerrar con tres hombres o si es el mediocentro quien se retrasa para reforzar a la zaga.
Jordi es una pieza nueva, o por lo menos, distinta a lo que hemos visto en el once tipo culé durante los últimos años. Por lo tanto, su presencia afectará al resto de piezas y a las relaciones y mecanismos que entre éstas se establecen. Algunas se perderán -cierre de tres atrás con los centrales y el lateral izquierdo- y se generarán otras nuevas. De entrada, en la banda izquierda, uno de los principales beneficiados puede ser David Villa. Limitado en su función de dar amplitud en banda izquierda, con Alba “haciendo de Alves” por banda izquierda, el delantero asturiano se desharía de esa obligación para aparecer más libremente por el centro. También Iniesta encontraría ese jugador que estirase a la zaga rival para que el manchego disfrute de espacios por dentro y encuentre mayor número de situaciones de uno contra uno. Por último está Messi, quien suele recibir ligeramente decantado sobre la banda derecha para encarar saliendo hacia dentro. En esas situaciones, en las que argentino repliega al sistema defensivo sobre él, Alba encontrará la banda despejada y Leo el cambio de orientación fácil.
Rene S 28 junio, 2012
Te leo desde hace muchos años y me parece un gran sitio el que tienes
Segun tu planificacion deportiva, sigue el central el cual podria salir de la dupla Hummels – Javi Martinez
Prefiero al aleman, pero me fio en el criterio tecnico de Tito y Zubi
Espero que cuando ya esten los nuevos fichajes, haya un post sobre lo que se espera del equipo
Iniesta10 29 junio, 2012
Moren, ¿ves incompatibles a Jordi Alba y a Neymar?
Lo digo porque en principio, una banda compuesta por Jordi Alba, Iniesta y Neymar parece estratosférica. Más si por el centro entra Messi, y por la derecha está Alexis y puede llegar también Cesc.
Moren 23 julio, 2012
No me parecen incompatibles para nada, hablando siempre de un horizonte 1-4-3-3. Más bien al contrario. En mi opinión lo mejor de Neymar está por dentro, y aunque cuando aterrice en Europa seguramente empiece en la cal, el brasileño evolucionará a un papel mucho más central.
En este sentido, un lateral como Alba no sólo no es incomptible con Neymar sino que resulta beneficioso pues le liberará de la responsabiliad de aguantar la banda. De llegar al Barça, seguramente, de entrada veamos algo cercano a la banda Messi-Alves del primer año de Pep, con un desenlace similar en cuanto a la posición del extremo.