
Un intento fallido, Busquets y poco más
El Barça afrontaba su primer partido desde que la lesión de Gerard Piqué se juntó con la de Víctor Valdés dejando al equipo sin capacidad para resistir dentro del área. Martino, conocedor de su equipo y consciente de que estas dos piezas justificaban, en parte, la propuesta de juego de las últimas semanas, probó a plantear una alternativa. Lo comentábamos el jueves: Si en el área sales perdedor, lleva la batalla a otro sitio. La idea previa al pitido inicial era esa, que lo que sucediera en la mitad del campo del Betis sostuviera lo que pudiera pasar en la mitad azulgrana.
Con la voluntad de que tanto la transición ofensiva como la defensiva se desarrollase en campo rival, el Barça saltó al campo con Pedro y Alexis Sánchez en bandas y con Iniesta y Xavi en los interiores. Los extremos son los dos delanteros de la plantilla que más desgaste pueden sumar en la recuperación adelantada, y en mediocampo se pretendía que Iniesta alojase al equipo en campo contrario y que una vez ahí Xavi lo organizara. Sin embargo ni el 8 ni el 6 terminaron de entrar en el partido, de modo que el Barça ni se asentó arriba ni se ordenó. La teoría no se pudo llevar a la práctica y el discurso del partido volvió a ser el antiguo. Aquel en el cual al rival no le cuesta mucho trabajo encontrarse en la mitad del campo culé y en el que Valdés y Piqué achican agua. Ayer además, como el plan era otro, también faltaba Cesc y su refuerzo al mediocentro.
En un partido abierto, de ida y vuelta sin control, el Barça tiene a Messi, Alexis, Pedro y compañía, y a eso se expuso el Betis a cambio de mantener sus opciones en el otro lado del campo. Afortunadamente para el Barça, en un escenario en el que suele ser imprescindible Gerard Piqué, Busquets tomó el relevo del central. Especialmente inspirado en el gesto técnico y responsabilizado y multiplicado en lo táctico, el mediocentro fue el encargado de corregirlo todo. Especialmente la banda derecha. Aunque por momentos pareció reproducirse el doble pivote del martes con Xavi en el perfil izquierdo, la mayoría de minutos el dibujo fue el habitual con el de Terrassa en el interior derecho, Iniesta en el izquierdo y Busquets en el mediocentro. Aún así, es significativo que fuera el de Badía el que acudiera en más ocasiones a la orilla derecha a compensar. En transición defensiva, Sergio fue mediocentro e interior. Tanto para ayudar a Alves y Alexis como para compensar a Bartra.
El canterano encarnó el intento fallido que supuso el partido para el Barça. Asumido que en el área sería menos que Piqué, Martino le pidió a Marc que fuera más Bartra donde mejor puede serlo. Lo enfocó a la anticipación hasta límites negligentes, saliendo tan arriba como se produjera la pérdida, varios metros más allá de la divisoria. Mientras la idea fue encerrar todas las fases del juego en campo verdiblanco, el planteamiento era arriesgado pero encajaba, sin embargo, cuando el plan se descubrió fallido -o más que el plan, su puesta en escena-, el achique exagerado del central fue un agujero. Por suerte para el canterano, Martino y el equipo, estaba Sergio Busquets. Y poco más.
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Alan 7 abril, 2014
Lo mejor del partido fue la genialidad del niño maravilla : https://www.youtube.com/watch?v=NuL19EqEha8
El control es brutal…