Semifinal sin gol
El Barça tenía que ganar el primer partido para poderse jugar la Liga en el segundo. No lo hizo, pero como el Atlético de Madrid tampoco, todo queda igual con la salvedad de que el Real Madrid queda fuera de la pelea. Habrá final en la última jornada, y los azulgranas la jugarán en casa. El Atlético de Simeone contra el Barça de Martino. Pero para eso falta una semana todavía, y aunque será inevitable pensar en ello hasta entonces, primero vayamos a lo que aconteció ayer, que fue la jornada 37.
El Barça la jugaba en el Martínez Valero de Elche, ante el equipo de Fran Escribá. El once culé lo formaron diez protagonistas esperados y uno inesperado: Cesc entraba por Xavi. El de Terrassa, durante la semana, no ha completado los mismos entrenamientos que el resto de la plantilla y cuando entró en el segundo tiempo se le vio especialmente pesado, pero aún así sorprendió su ausencia. Cesc es un aporte extra de intensidad en ambas transiciones, movilidad, juego entre líneas, intimidación en el área y un desahogo para Messi, pero en el cambio el Barça sacrificaba la comodidad del plan conocido y control. Una pérdida esta última que en los primeros 45 minutos apenas afectó, pues el 4-5-1 de los locales dejaba a un sólo punta como única amenaza para Bartra y Mascherano, que entre ambos controlaron bastante bien. El Elche salió a defender ancho y a presionar arriba, sabiendo que sin Valdés ni Piqué, el Barça ahí concede. Rodrigues, Coro y Carles Gil, más el auxilio extra de uno de los dos interiores. Ya fuera con Rubén Pérez o con Javi Márquez, la primera línea de presión ilicitana solía incorporar a un cuatro hombre. Por detrás, el colombiano Carlos Sánchez ejercía de hombre-escoba.
Sin embargo, el Barça a la espalda de esa presión adelantada del Elche, encontró la plataforma perfecta para que recibieran Cesc y Alexis Sánchez. Gran primera mitad de ambos, permitiendo al Barça llegar arriba con la línea de medios del rival de espaldas al arco que defendía Pinto. El cuatro y el nueve aparecieron principalmente por el perfil derecho, hacia donde, junto a las caídas de Messi y los apoyos de Dani Alves, se volcó el partido. Se generaron ocasiones pero el gol no llegó, en parte, porque al Elche se le simplificaba el trabajo haciéndole defender sólo una de las dos orillas. La banda izquierda del Barça produjo muy poco. Iniesta aparecía a cuentagotas, Pedro permanecía demasiado estático y Adriano o no tuvo claro su papel o no supo como ponerlo en práctica. Aún así, la posición abierta del canario, permitió al Barça una solución simple para dar profundidad a sus ataques y jugar cerca de la portería de Manu Herrera.
Tras el descanso, el Elche disminuyó su presión y el Barça aumentó su nerviosismo. Se redujeron los espacios a la espalda del mediocampo ilicitano y se atacó con menos orden y fluidez. Entró Tello para tratar de darle al sector izquierdo la dosis de peligrosidad que no había tenido antes, y Xavi para exprimir 10 minutos el canon. Quién salió del campo fue Cesc, una sustitución lógica viendo el bajón físico en el segundo tiempo del de Arenys, pero que trae consecuencias. Del mismo modo que sin Xavi se pierde orden atacando, sin Cesc se pierde presencia defendiendo, lo que terminó por dibujar un partido totalmente abierto. Pudieron marcar los locales, en gran parte gracias a los buenos minutos de Boakye y a su posición. Escribá, cuando el Elche defendía, lo situó al lado de Busquets sabiendo que como el Barça se iría arriba, cada vez sería mayor la distancia entre el mediocentro y los centrales culés. Tras recuperación, salida a esa zona desocupada a la que Sergio no llegaba y de la que Bartra y Mascherano quedaban lejos.
No marcaron ni unos ni otros. El Elche se aseguró matemáticamente la permanencia en Primera, y el Barça, sumando los mismos puntos que el Atlético, lo pospone todo siete días. Depende de él y se decidirá con su afición en las gradas. Será en el Camp Nou.
Iniesta10 12 mayo, 2014
Por un lado pienso que el Barça no está bien, pero por otro lado los demás (Atletico y Madrid) tampoco es que estén muy finos que digamos.
Los blancos ya han tirado la liga en un incomprensible estado de relajación. Desde que eliminaron al Bayern no dan pie con bola, y en los últimos tres partidos, de 9 puntos posibles solo han logrado 2.
Los colchoneros podrían tener ya esta liga sentenciada, pero tampoco la han machacado.
Total, aunque dificil, el Barça tiene la liga a mano, pero … habrá que acertar más, porque a este paso no pasamos del empate.
La cosa está dificil … pero tenemos la liga donde queríamos. Ahora toca ganar si o si.