
Gerard, Denis y Alen
Gerard Deulofeu se ha encontrado en la Premier. Tras un año de poco protagonismo pero, al parecer, bastante maduración en Sevilla, ha logrado asentarse en una liga inglesa que esta vez no lo recibe con sensación de interinidad. Pertenece a uno de los suyos aunque el Barça se reserve una opción sobre él, y el jugador ha agradecido esta nueva situación de mayor estabilidad en un club que conoce. También las características de un campeonato que facilita como pocos contextos para futbolistas con sus condiciones, ya que es fácil que encuentren sin demasiado esfuerzo escenarios abiertos donde poder explotar carrera y capacidad para desequilibrar en el uno contra uno. Además, esta temporada Gerard tiene en Romelu Lukaku al aliado perfecto para justificar su juego, siendo el corpulento delantero belga quien concreta buena parte de lo que el catalán genera desde la banda. La sociedad que forman entre los dos pasa por ser una de las más letales de lo que llevamos de Premier League, habiendo generado, directamente, un elevado número de goles desde un mecanismo tan austero y a la postre eficaz como el desborde y posterior centro del extremo para el remate del punta. Cabe la duda de si, precisamente, esta sencillez que ahora mismo aúpa al canterano culé, puede terminar siendo una traba para que finalmente florezca todo el talento que atesora, pues la realidad del fútbol inglés no se lo está reclamando a la hora de ser capaz de marcar diferencias importantes. Es de esperar que lo haga cuando los rivales apliquen sobre él defensas más específicas de las que vienen planteando, algo que, como la producción de la pareja Lukaku-Deulofeu no baje el ritmo, sucederá más pronto que tarde.
También lleva varias semanas asentado como titular en su equipo Denis Suárez, otro de los futbolistas controlados contractualmente por el F.C.Barcelona. Le costó al principio, aquejado de una intrascendencia que arrastraba de su mal año en Sevilla, pero desde hace unas cuantas jornadas parece haber encontrado su lugar en el equipo de Marcelino. Y lo ha hecho jugando en banda, no solo partiendo desde ella. El Villarreal, tradicionalmente, es un conjunto que ha requerido de sus teóricos mediocampistas abiertos que terminaran interviniendo por dentro entre líneas, constituyendo este tipo de futbolista prácticamente un emblema del conjunto amarillo de los últimos años. Esta temporada, sin embargo, ninguno de los hombres alineados a los lados del doble pivote han sumado demasiado ahí, ni siquiera un Denis que por perfil podía ser quien más encajara. El gallego ya insinuó en el Pizjuán que su éxito en el Miniestadi jugando en posición de extremo seguramente revelaba más de lo que parecía entonces, y su andadura en Primera División aparenta evidenciar que, al menos por ahora, el futbolista tiene más problemas de los esperados para hacer pesar su juego por dentro. En el cuadro de Marcelino, sin embargo, la explosión de un Roberto Soldado hasta ahora desconocido y el descargo que le ofrece Bakambu al valenciano para poder aparecer en la frontal sin ataduras, ha abierto la puerta a que el técnico matice la idea con respecto a las alas y pueda mantenerlas abiertas de forma más fija. Así, dos futbolistas como Denis y Jonathan Dos Santos cuyo origen parecía encaminarlos al carril central, donde más están sumando es cerca de la cal.
Hasta anoche, cuando con dos goles permitió al Sporting agarrarse a una eliminatoria cuesta arriba, el momento de inspiración de Alen Halilovic en el conjunto de Abelardo había descendido ligeramente. Seguía siendo tan fijo como importante, y uno de los hombres a partir de los cuales explicar al colectivo, pero el momento de brillantez que semanas atrás atravesó se había mudado a la otra orilla, a los pies de Jony. Además de la lógica evolución en la temporada de cualquier futbolista y más aún en la de uno tan joven, dos son los factores que pueden haber contribuido a que el Halilovic de las últimas semanas haya resultado menos deslumbrante que el de sus mejores tardes. Por un lado, a él como a todo el Sporting le ha afectado muy considerablemente la lesión del mediocentro Sergio Álvarez. Sostén desde el mediocampo y sin un recambio de su mismo perfil, su ausencia ha contribuido a que el cuadro asturiano tenga más facilidad para partirse, un inconveniente que castiga especialmente a Halilovic ahora que ha retornado a la banda, pues le obliga a un mayor desgaste sin balón para rellenar las grietas que se abren en el perfil derecho del equipo. La segunda cuestión tiene que ver precisamente con este regreso a la orilla, pues desde la derrota por 0-3 ante el Levante, Abelardo ha apostado en las últimas tres jornadas por utilizar al camerunés Ndi como acompañante del punta. Y es que con él encuentra El Pitu a un futbolista capaz de aunar la destreza para bajar el balón y protegerlo de espaldas, con una capacidad al espacio potencialmente muy interesante. Dos facultades que, en este momento y hasta poder contar de nuevo con Sergio Álvarez, el Sporting agradece muy especialmente.
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George Best the best 18 diciembre, 2015
– Deulofeu hubiera sido la solución ideal como primer recambio en la delantera del Barsa este año, y sigo pensando lo mismo de cara al año que viene. Desequilibrio, 1×1, perfil tanto en derecha como en izquierda, buen pasador y centrador y buena definición. No veo en el mercado un jugador con mayor capacidad, desborde y talento jugando por fuera. Otra cosa es el encaje a nivel de carácter, rol en el equipo, convivencia con los cracks y con el entrenador, etc. Yo sería partidario de darle confianza y tener mano izquierda y tacto con él porque es un talentazo.
– A Denis, que es muy bueno, le veo con alguna carencia en banda y como interior en el sistema Barsa, un pelín inconsistente (mucha pérdida, poco retorno…). No sé tengo una sensación extraña con él, es bueno, pero no lo veo….A priori debería ser el recambio generacional de Iniesta, pero dudo que termine dando el nivel. De todas formas no lo dejaría ir sin darle 20 partidos. Espero equivocarme.
– Halilovic tiene clase para dar y tomar. Para mí es un Messi en menor dimensión, pero lo tiene todo: regate, disparo, visión y pase. Hay que dejarlo crecer y si él tiene paciencia para esperar debería tomar el relevo en unos años de Leo.