El clásico: Planteamiento del F.C.Barcelona
Quedan poco más de 24 horas para que el silbato del árbitro marque el inicio del partido más esperado de lo que llevamos de temporada. Ayer nos detuvimos en el planteamiento que posiblemente presente Juande Ramos para vencer a los pronósticos que sitúan a su equipo como el claro derrotado. Hoy, por su parte, trataremos de abordar la labor de Pep Guardiola, que tendrá la difícil misión de preparar un partido que no tiene porqué reflejar la distancia real entre ambos conjuntos, en el que todos dan al Barça como claro ganador y donde las apuestas se encaminan más a saber la diferencia de goles a favor de los azulgranas que en el signo del resultado final. En este sentido, uno de los méritos de Guardiola será el de encontrar el punto de activación justo, evitar triunfalismos pero huir también de planteamientos que disparen las revoluciones de los jugadores. Es por eso que Pep, al contrario de la opinión de parte de la prensa y afición, no pasará el video del partido en el Bernabéu de la pasada temporada. Todos los jugadores que estuvieron esa noche sobre el césped tienen bien presente lo que ocurrió y declaraciones como las de Márquez, Henry o Puyol reconociendo que aquel partido fue el peor momento de su carrera, dejan patente que lo que ahí sucedió nadie lo ha olvidado.
La sed de venganza se respira en el entorno y los jugadores pueden tener la tentación de pensar más en la goleada que en la victoria, olvidando que un uno a cero valdrá lo mismo que una manita. El objetivo es dejar al Madrid a 12 puntos. Ese será el trabajo del entrenador, mentalizar a sus futbolistas de que el objetivo es ganar el partido, sin más, hacerles ver que el marcador debe ser el resultado del juego y no al contrario. Si transcurren los minutos y el gol no llega, el equipo no debe precipitarse y debe tener claro que seguir haciendo bien las cosas será el camino para llevarse el choque. El éxito de Guardiola será encontrar el punto de equilibrio. Tampoco debe contagiarse el equipo del triunfalismo que se respirará en la grada, un clásico es un clásico y cualquier pronóstico previo basado en el momento de juego y resultados que atraviesan ambos conjuntos puede saltar por los aires. El Barça no se enfrentará al Madrid en crisis, quinto en la tabla, con un técnico recién aterrizado y una afición que sacó pañuelos en su último partido de Liga, se enfrentará al Real Madrid, y eso sean cuales sean las circunstancias es suficiente para que los jugadores pongan los cinco sentidos y la máxima concentración en el choque.
Para Guardiola, un entrenador que tiene más en cuenta al rival de lo que en apariencia podría parecer, otra dificultad reside en el hecho que el Madrid de Juande es totalmente desconocido, ya que apenas una primera toma de contacto contra el Zenit no es suficiente para aventurarse en pronósticos sobre las ideas que intentará desarrollar en el equipo. Por este motivo, el técnico blaugrana tirará de vídeo para observar el comportamiento de los equipos del manchego cuando se han enfrentado al Barça. Así pues, verá que Juande gusta de jugar con dos puntas que fijen a los centrales y un mediapunta que retrase la posición del mediocentro rival. De cara al partido de mañana no esperamos una reproducción fija de este comportamiento, pero si prevemos que Higuaín, pese a partir de banda derecha, actuará durante muchas fases del partido como segundo punta. Pep sabe que este planteamiento obliga a retrasarse al mediocentro, arrastra a los interiores hacia posiciones más cercanas a la defensa, los desgasta obligándolos a un gran recorrido y sitúa al equipo más atrás de lo que el técnico persigue. Es por eso que ante rivales que presentan dos puntas, hasta la fecha ha optado por un sistema de marcas en que Piqué y Puyol actúan como marcadores y Márquez queda como hombre libre. Esto obliga, primero, a que el capitán se sitúe como lateral izquierdo, y en segundo lugar, a que Márquez ejerza como central por la izquierda y Piqué por derecha.
Así pues, contra el Madrid apostaríamos por una línea defensiva formada por Alves, Piqué, Márquez y Puyol, a causa de la variación que acabamos de comentar y por lo peligrosas que pueden resultar las diagonales de Higuaín desde banda derecha con un lateral como Abidal que suele tener algún despiste peligroso a la hora de cerrar al segundo palo y en el despeje de los balones aéreos que van de frente. Con esta pareja de centrales, demás, el Barça conseguiría una excelente salida de balón desde su defensa, permitiendo al resto del equipo adelantar líneas y obligando al Madrid ha estirarse.
Guardiola seguramente planteará el partido con el objetivo de sobrecargar las bandas, ya que en estas zonas es donde más problemas presenta el Madrid. Sin volantes específicos y con muchas bajas en los laterales, centrar la ofensiva por los costados puede ser la mejor manera de llevar peligro a la portería de Casillas. Para lograrlo, será importante abrir el campo en todo momento con la presencia de uno de los hombres situados al lado opuesto por el que circula el balón, pegado a la cal. A favor de este punto estará la posibilidad del Barça de lanzar una diagonal a cualquiera de las dos bandas, ya que mientras Alves o Piqué podrán realizar el envío a Henry, la alineación de Márquez en el central izquierdo permitirá al técnico contar con la diagonal del mexicano sobre Messi o, sobretodo, buscando a Alves. Cuando el Barcelona juegue el balón en su línea defensiva, sería muy interesante que Messi ocupara la zona de la mediapunta, lo que desencadenaría una serie de reacciones que favorecerían el juego combinativo de los culés. Por un lado, la presencia del crack argentino entre líneas obligará a la media del Madrid a cerrarse sobre él y, por lo tanto, se minimizará su capacidad para recuperar y robar en zona de creación. A su vez, si finalmente el lateral izquierdo recae en Míchel Salgado, debido a que se trata de un jugador con tendencia a abandonar la línea y seguir a su par -más si este es Messi-, con este desplazamiento del 10 azulgrana a la mediapunta el equipo logrará habilitar un enorme pasillo para Alves que puede ser aprovechado mediante el desplazamiento diagonal de Rafa Márquez.
En la construcción, así miso, será frecuente que tal y como ha sucedido a lo largo de la temporada uno de los dos centrales se sume con balón al centro del campo, posibilitando una superioridad numérica que empuje a Xavi a recibir más arriba, dominando, junto a Messi, la zona de tres cuartos de campo. Con Alves abriendo la banda derecha, Márquez o Piqué manteniendo el equilibrio en la medular, Henry y Eto’o estirando a la defensa blanca desde la izquierda y Messi atrayendo a los centrocampistas, Xavi podrá recibir con mayor libertad y, a partir de esta situación, el Barça empezará a construir juego.
En ataque no prevemos una delantera con posiciones fijas, sino que las circunstancias de la defensa que presentará Juande provocarán que los tres atacantes locales intercambien sus posiciones a lo largo del partido. Este es el peligro de disponer a tus defensas pensando en los emparejamientos directos contra un equipo que cuenta con un tridente atacante con tantos recursos. Con un simple cambio de posición entre los atacantes, el técnico rival puede desmontar el planteamiento, de manera que si se buscaba el emparejamiento directo entre Metzelder y Henry, o entre Ramos y Messi, éstos pueden intercambiar posiciones y condicionar un escenario completamente distinto. Varias son las soluciones que manejará Guardiola: Messi para romper a un central corpulento jugando en banda como Metzelder, Eto’o para jugarle a un lateral a banda cambiada, Henry emparejado con Salgado para aprovechar la diferencia de altura y las dificultades del gallego para cerrar por dentro… Cierto es que de este modo se pierden automatismos y sociedades entre jugadores muy consolidadas, pero a cambio, la superioridad en los enfrentamientos directos puede resultar definitiva.
Así, partiendo de una delantera con Messi por la derecha, Henry en la izquierda y Eto’o por el centro, podemos encontrar situaciones en las que Messi se empareje con Metzelder en el lateral izquierdo o que Eto’o caiga a banda derecha aprovechándose de un lateral a pierna cambiada como Salgado, obligando a abrirse a Cannavaro y habilitando el segundo palo para Henry y las llegadas del interior izquierdo. Ésta puede ser otra de las claves del planteamiento de Guardiola, ya que se preve un partido en el que la segunda línea culé tendrá espacios para llegar a situaciones de remate, sobretodo en banda izquierda, por lo cual, más que para Busquets o Hleb, el de mañana es un partido para Gudjohnsen o Keita -nosotros optaríamos por el primero-, que tendrán la misión de pisar área buscando ganar los balones al segundo palo y defensivamente taponar la opción más clara del Madrid para construir juego desde la defensa, la salida por Sergio Ramos.
Manuel 12 diciembre, 2008
Muy buen post. Sobre todo muy pero que muy currado
Mi alineación inicial era
……….Valdés
Alves-Márquez-Puyol-Abidal
…Xavi…Touré…Keita
Messi…..Eto’o…..Henry
Pero me ha gustado el detallazo de poner a Puyol como lateral izquierdo dado que Higuain no jugará de extremo, sino de segunda punta, haciendo diagonales hacia dentro, por lo que un lateral a pierna cambiada (Puyol es diestro) le complicará más las cosas. Si colocas a Puyi ahí, puedes colocar a Piqué de central y asegurarte una buena salida de balón.
Y también veo bien el cambio de Keita por Gudjhonsen, que por otra parte, fué el único que resenvó Pep contra el Shacktar (jugaron Busquets y Keita).
Creo que el partido será parecido al del Sevilla-Barça, ya que el equipo andaluz también utiliza un 4-4-2 adelantado. Ahí se vio que las funciones que asumía Fazio serán las que deba asumir ahora Gago. Ese partido, aunque el marcador al final fué contundente, durante el primer tiempo no dominó el Barça. Pero este partido es un poco distinto, ya que el RM llega con un cambio de sistema, con muchos jugadores no habituales, y con muchas dudas, pero … eso si, con el cuchillo entre los dientes.
Un saludo.
LeccionesdelaPelota 13 diciembre, 2008
Bueno, queda poco para el partido, hacemos un análisis a vuela pluma de el planteamiento de ambos técnicos. Resumo un poco las ideas para que no suene a chapa.
Juande planteará un 1-4-3-3 camuflado en un 1-4-4-2 que veremos durante gran parte del partido. En los laterales veremos a Salgado y Ramos, mientras que Metzelder y Cannavaro conformarán la pareja de centrales. Juande Ramos planteará una defensa adelantada que busque la anticipación como mejor medio para paliar el juego asociativo del Barça en campo contrario. Disiento un poco con Juande Ramos en la elección de Metzelder como central si se busca una defensa adelantada, pues el Real Madrid pierde velocidad y se queda a disposición de la velocidad de los hombres de ataque del FC Barcelona.
Un equipo muy compacto, milimétrica distancia entre líneas y pensando para dejar los menos espacios posibles para la creación de la jugada del FC Barcelona. El objetivo es alejar al Barça de la zona de aceleración. Podremos ver al triángulo Ramos-Gago-Metzelder para anular o mejor dicho, intentar reducir el potencial de Lionel Messi.
Con respecto al Barça, poco hay que comentar. Finalmente jugará Guddy. No era mi opción preferida para el puesto de interior izquierdo pero aportará solidez, trabajo y consistencia al centro del campo del Barca. Guardiola como siempre jugará al despiste. Para mi el gran secreto de este equipo es la capacidad de alternar en un once futbolistas tan distintos y tan complementarios a su vez. Importantísimo como siempre Messi, a la hora de provocar la retroalimentación de Henry y Daniel Alves, y sobre todo a la hora de ser una referencia para sus compañeros en el juego entre líneas.
También importante Henry en sus diagonales y en surtir de movimientos a un Xavi que depende exclusivamente de ellos. Sin más, creo que excederme sobra, queda poco para el encuentro, las palabras no salen, el análisis apenas importa. Como he dicho, en este tipo de partidos pesa más la historia que muchos argumentos futbolísticos. Sin más, suerte a ambos equipos y que gane el mejor.
Jordi 18 diciembre, 2008
Para cuándo un post sobre Juande? Tenemos que frenar la euforia los culés?
Espero que los astros nos vengan de cara…
Ruben 22 diciembre, 2008
Te he mandado un mail al correo del blog.