Las 10 maravillas de Pep Guardiola: 6- El inicio del mes más feliz
Temporada 2008-09. Jornada 34. Real Madrid-Barça: 2-6
Valdés; Alves, Piqué, Puyol, Abidal; Touré Yaya, Xavi, Iniesta; Eto’o, Messi y Henry.
Los aficionados del F.C.Barcelona jamás olvidarán el mes de mayo de 2009. Seguramente sea la mayor concentración de felicidad y euforia que jamás ha vivido la centenária institución. Mayo de 2009 se coronó en Roma con la conquista de la tercera Champions del club. Hasta llegar a esa cita, y a lo largo de 25 días inolvidables, el equipo logró la Copa del Rey, confirmó matemáticamente el título de Liga y vivió la explosión del gol de Iniesta en Stamford Bridge que le abría las puertas del triplete. Si el final apoteósico de ese mes de mayo fue en el Olímpico de Roma, el inicio se forjó en el Santiago Bernabéu.
En el feudo del máximo rival, se enfrentaban los dos primeros clasificados a falta de 5 partidos para terminar la Liga. El Barça de Guardiola, que había dominado con firmeza durante toda la temporada, llegó a situarse a 12 puntos del Madrid tras el clásico de la primera vuelta, pero ahora, tras algun tropiezo inesperado, la disputa se apretaba. Pasase lo que pasase el Barça saldría líder, pero en el ambiente flotaba la sensación de que una victoria del Madrid le daba la Liga a los blancos.
Así pues Juande Ramos, que se había estrenado en el banquillo merengue en el clásico de la primera vuelta con un planteamiento netamente conservador, salió a apretar desde el inicio con el ímpetu del que llega remontando desde atrás y ve como puede estar a su alcance algo que antes le parecía imposible. Los primeros compases del choque fueron del Madrid, que apoyándose en un Robben que se imponía a Abidal en el perfil derecho del ataque blanco. Desde esa banda nació la jugada del gol que puso por delante de los de la capital, tras un centro de Sergio Ramos que cabeceó Higuaín aprovechándose de un choque entre Touré y Robben. Gago y Lass para desplegar su hiperactividad sobre la pareja Xavi–Iniesta, Robben para generar desequilibrio y Raúl e Higuaín para rematar. El plan de Juande parecía haber surtido efecto y el técnico no cambió la ruta, el equipo seguía hiendo arriba a buscar al Barça.
Con lo que el técnico manchego no contaba era con la sorpresa de Guardiola. Por primera vez desde que el experimento tuvo éxito a principios de temporada en el Molinón, Guardiola situó a Messi como falso nueve. Juande lo esperaba en banda, y había reforzado su perfil izquierdo con un doble lateral formado por Heinze y Marcelo. Leo, sin embargo, jugaba a la espalda de los dos mediocentros blancos. Gago y Lass salían buscando a los interiores culés, los centrales se quedaban atrás y Messi recibía a placer en el espacio que se generaba entre ambos. Si los mediocentros volvían, el 10 la devolvía fácil para Xavi o Iniesta y el Barça empezaba a mandar. Si quien salían eran los centrales, el latifundio que se generaba entre ellos y Casillas lo atacaban Henry o Eto’o desde la banda entrando al espacio. Cuatro azulgranas para dos merengues en la media. El festín estaba servido y los de Guardiola lo devoraron con fruición.
Carlos 8 septiembre, 2012
Vivimos en una sociedad tan competitiva donde nos olvidamos muy deprisa del pasado, es cierto que los resultados pasados no te hacen ganar nada en el presente, pero algunos tendrian que recordar a veces que estos jugadores que criticamos a veces (por ejemplo Valdes) ya han dado mucho al club, que son humanos y tambien cometen errores, cobren lo que cobren, y si ganan demasiado es culpa mia, tuya y de todos los que gastamos dinero en esto, no es culpa suya.
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