Liverpool vs. Inter
Avanzando en el seguimiento de lo que pueden dar de si los emparejamientos más interesantes de los octavos de final de la Champions League, hoy nos detendremos en otro choque de trenes entre dos equipos que parten como firmes candidatos a erigirse como los campeones de la Champions. A un lado de la lona, el Liverpool de Rafa Benítez regresa a su competición fetiche, donde ha logrado llegar a dos finales en las últimas tres ediciones, y en una de ellas conseguir el título en una de las finales más espectaculares que se recuerdan, después de remontar un cero a tres al Milan en 45 minutos. Esta temporada, pese a haber realizado un importante desembolso económico con el objetivo de pelear en el campeonato doméstico hasta el final, el escenario de anteriores ediciones vuelve a repetirse, es decir, la Champions se presenta como la oportunidad de salvar una más que mediocre campaña en la Premier League, en la que lejos de pelear por la cabeza de la clasificación, hoy por hoy, se haya fuera de las plazas de Champions. En frente, los reds tendrán al eterno aspirante, un Inter de Milán acostumbrado a los fichajes sonados, los proyectos rimbombantes y a los no menos espectaculares batacazos. No obstante, la resolución del caso Moggigate, parece haberle otorgado el temple suficiente para reinar con autoridad en el Calcio por segunda temporada consecutiva y postularse, esta vez sí, como un candidato real al trono europeo.
Inter:
Lo más normal hubiese sido respetar el orden de equipo local y equipo visitante a la hora de iniciar el análisis de los planteamientos que pueden presentar tanto Mancini como Benítez de cara al partido de ida de estos octavos de final, y por consiguiente, empezar hablando de la propuesta del Liverpool. No obstante, hablar de Rafa Benítez es hablar de un entrenador estudioso hasta el milímetro del rival, desmenuzando sus fortalezas y debilidades, y a partir de este trabajo de ojeador, elaborar el plan que le lleve al éxito y elegir las piezas más indicadas para llevarlo a cabo. Es por eso, pues, que empezaremos el análisis del partido centrándonos en el Inter, ya que a partir de sus características como equipo, se articulará el planteamiento de Benítez.
El equipo de Roberto Mancini se presenta por norma general en un sistema 1-4-4-2 preparado para crear peligro a partir del contraataque. La portería es propiedad del brasileño Julio César, un portero ágil y con buenos reflejos que con el paso del tiempo ha mejorado mucho en la colocación, producto de su aprendizaje en el fútbol italiano. Sufre, no obstante, en los balones aéreos a causa de su poca decisión en las salidas a la hora de imponerse en un balón colgado desde la banda. Por delante, formando en una defensa de cuatro, los italianos cuentan con un amplio abanico de posibilidades, con futbolistas de nivel y de características distintas en todas las posiciones. En el lateral diestro, el técnico cuenta con el veterano Zanetti, uno de los laterales más importantes de los últimos tiempos, pero a quien el paso de los años no perdona y progresivamente ha situado en una demarcación más adelantada como centrocampista, el polivalente Burdisso para cerrar la banda defensivamente pero con una oferta muy limitada en lo que a prestaciones ofensivas se refiere, y quien con toda probabilidad partirá como titular contra el Liverpool, Maicon. Y es que Maicon es hoy por hoy uno de los mejores laterales diestros del mundo, titular en la canairinha por delante del sevillista Daniel Alves, se trata de una auténtica fuerza de la naturaleza, fuerte, potente y veloz, capaz de cerrar su banda atrás y proyectarse constantemente a posiciones ofensivas, recuperando la figura del clásico carrilero brasileño. La banda derecha del Inter, pues, con Maicon en el lateral y Zanetti en el centro del campo, es el costado fuerte del equipo, ya que ambos se complementan a la perfección, haciendo un excelente trabajo de coberturas cuando uno de los dos progresa por banda y configurando, en defensa, una pareja prácticamente imposible de superar.
En el eje de la zaga la duda radica en el encargado de acompañar a Materazzi, el alma del equipo. Las opciones son Córdoba o Burdisso, dos jugadores de características parecidas cuando actúan de centrales, marcadores férreos, agresivos y rápidos, y que gozan de la confianza del técnico. Finalmente el lateral izquierdo recaerá en Chivu, desplazado por la presencia de Materazzi a la banda, donde se convierte en un jugador fundamental en la salida desde atrás merced a sus desplazamientos directos a los puntas o diagonales buscando la velocidad tanto de Maicon como de Zanetti entrando al espacio por banda derecha.
En la media, junto a Zanetti, el técnico italiano apuesta por un doble pivote en que se encuentra por un lado Luís Jiménez, quien ha pasado por delante de jugadores como Vieira o Dacourt y se ha afianzado como una pieza importantísima para el técnico, y el “Cuchu” Cambiasso que es el encargado de armar el ataque neroazurro y el cerebro del equipo que marca el ritmo del juego. Finalmente por banda izquierda, Mancini cuenta con la alternativa del serbio Stankovic, un futbolista de carácter netamente ofensivo, con buena visión de juego, depurada técnica individual y con un disparo de larga distancia muy peligroso. No obstante, puesto que el partido de ida se disputa en Anfield, no sería descabellado pensar que el entrenador pueda dar entrada en el once a un futbolista más defensivo, como Maxwell o César, buscando cerrar la banda de manera más eficiente y salir con velocidad a la contra.
Los contragolpes del Inter son ataques en los que intervienen pocos futbolistas, ya que a parte de los dos puntas, difícilmente más de dos futbolistas se involucran en la ofensiva. El resto de jugadores guarda su posición defensiva y se sitúa de manera que en caso de que el rival recupere el control del balón, el equipo se encuentre perfectamente organizado. Así pues, los protagonistas principales del contraataque italiano son sus dos delanteros, el crack Ibrahimovic y Julio Cruz, quienes lo conducen a gran velocidad, a partir de la combinación a uno o dos toques y desmarques muy inteligentes que impidan a la defensa contraria cerrarse sobre el balón. El sueco es uno de los delanteros más talentosos del planeta, magistral trabajando para sus compañeros abriendo espacios, recibiendo de espaldas o asistiendo, al que únicamente le falta unos mejores registros goleadores, puesto que no se trata del clásico killer en que el equipo puede confiar aunque sólo tenga una única ocasión de gol. No obstante, eso es lo que define a su acompañante en la punta de ataque, el argentino Cruz, un futbolista que no destaca por su calidad pero que ofrece un rendimiento goleador excelente siempre que juega. Ambos forman, pues, la pareja más completa de las que permiten las combinaciones con los otros dos delanteros de la plantilla: Suazo y Cresco, quienes aguardan desde el banquillo como plan B, uno para sacar provecho de su velocidad, dinamismo y habilidad en el desmarque, y el otro a su dominio del juego de espaldas a portería, oportunismo en el área y capacidad para imponerse en los balones aéreos. La función de los puntas es básicamente ofensiva y su trabajo defensivo se reduce casi por completo a la defensa en las jugadas de estrategia, en las que no es extraño ver al Inter defender con los once jugadores, ahorrando energías a la espera de que su equipo recupere el balón y lance el contragolpe.
Alineación:
12J.César-13Maicon-2Córdoba-23Materazzi-26Chivu-4Zanetti-19Cambiasso-11Jiménez-5Stankovic-8Ibrahimovic-9Cruz.
Liverpool:
Como hemos comentado anteriormente, Rafa Benítez es un entrenador que tiene muy en cuenta al rival al plantear los partidos, desmenuzando cada uno de los aspectos de su juego y trazando sobre el tablero de ajedrez el plan perfecto para lograr la victoria. Analizando al Inter, vemos pues, que ofensivamente se trata de un equipo que, salvo la diagonal de Chivu desde el lateral, tiene poca capacidad para sacar el balón jugado desde atrás, por lo que abusa del balón directo y el juego de contraataque en el que emplea a pocos jugadores. En defensa, por su parte, planeta una estrategia de repliegue tras perdida con apenas presión a la salida del rival y volcando sus esfuerzos en la defensa sobre la banda por la que ataca el adversario, utilizando para ello hasta cuatro futbolistas -el lateral, el centrocampista del mismo costado y los dos pivotes-. Este retorno del mediocampo se realiza prácticamente con tres hombres ya que Cambiasso goza de bastante libertad en lo que a responsabilidades defensivas se refiere, dibujando un centro del campo en rombo que durante la basculación a banda, deja un enorme espacio libre en la banda contraria. Así pues, poniéndonos en la piel de Benítez, plantearemos un 1-4-4-2 que en defensa se convierta en un 1-4-5-1, pasando el segundo punta a cubrir la salida sobre Chivu, para de este modo poblar el centro del campo con más hombres de manera escalonada para minimizar riesgos ante las contras italianas, que deben prestar mucha atención a la transición ataque-defensa y a la falta táctica.
La situación de la línea defensiva, por su parte, mostrará la intención del técnico red, pudiendo escoger por una opción más defensiva o una que convierta a su equipo en el protagonista del choque. Si opta por la alternativa conservadora, planteará una línea defensiva próxima a Reina, dejando pocos espacios a la espalda de los zagueros y aprovechándose de la poca salida controlada desde atrás del rival. Esta opción, protegería la portería de Reina, pero no aprovecharía las debilidades del Inter. Así pues, con una presión agresiva sobre la salida del balón de la defensa italiana, el Liverpool tendría muchas probabilidades de recuperar el esférico en una zona peligrosa, coger desorganizada la defensa rival y llegar a la meta de Julio César en muy poco tiempo. Para ello, no obstante, es imprescindible que la defensa se sitúe adelantada para no abrir distancias entre líneas, situación en la cual no tiene cabida en el once Hyypia. Sin el finlandés ni Agger, la opción puede ser Álvaro Arbeloa, aunque desde EUMD apostaríamos por dar entrada al recién llegado Martin Skrtel, que ha venido siendo titular en los últimos partidos del Liverpool, ya que aportaría los centímetros en la defensa de los balones aéreos de Hyypia, y no sufriría en una defensa adelantada por tener una mayor velocidad a la hora de recuperar la posición.
En la media, optaremos por una línea de cuatro en que Gerrard parta de inicio de la banda derecha, aunque la poca presencia ofensiva de Chivu le permitirá incrustarse en la zona central, junto a Mascherano y Xabi Alonso, formando un trivote que dificulte la creación del rival y posibilite recuperar el balón con mayor facilidad. Por banda izquierda, dado el peligro que comporta la pareja Zanetti-Maicon por fuerza, potencia y recorrido, recurriremos a Riise en la medular para contrarrestar con otra pareja de laterales y a la vez, sacar provecho del peligroso chut lejano del noruego. Finalmente, en punta junto a Torres, apostaremos por un futbolista sacrificado en la presión como Kuyt o Voronin para que realicen la marca sobre Chivu cuando el Inter trate de iniciar jugada desde atrás.
Desactivadas las armas ofensivas del rival, es el momento de trazar el plan que nos permita explotar sus debilidades. Así, junto a la presión en primera línea que nos permita recuperar en balón en una zona del terreno de juego favorable, dirigiremos nuestra ofensiva hacia las bandas, donde el repliegue del mediocampo en rombo del Inter, posibilita un sistema de coberturas deficiente. Tratar de entrar por banda izquierda con Zanetti y Maicon posicionados en defensa más la ayuda de Jiménez, sería una misión prácticamente imposible, por lo que el ataque se dirigirá a banda derecha. Ahí, Gerrard contará con el apoyo corto de Mascherano y de Xabi Alonso en largo, más próximo al circulo central. El objetivo será que el centro del campo rival focalice la presión sobre el capitán red con la participación de Chivu, Jiménez y Cambiasso, dejando a Zanetti basculando a la posición de mediocentro. A partir de esta situación es cuando lanzaremos nuestros ataque. Una alternativa, será la de aprovechar la lentitud y escasa cintura de Chivu para lanzar un pase a su espalda buscando a Voronin (o Kuyt), quien se verá favorecido por el hecho que el central que deberá seguirle es un defensor más bien lento como Materazzi. Así pues, ganando la espalda a Chivu y arrastrando a Materazzi, Córdoba se encontrará prácticamente en un uno contra uno con Torres en el área ya que Maicon no es un lateral que cierre demasiado bien.
La segunda opción es la de crear una situación de ataque por banda izquierda. Partiendo de la misma situación, es decir, balón en banda derecha con el Inter basculando en rombo, Mascherano en el apoyo corto y Alonso en el apoyo largo, el objetivo es ceder el balón a uno de estos dos para lanzar a gran velocidad -a uno o dos toques- un pase al espacio a banda izquierda buscando la subida del lateral aprovechando que Zanetti estará situado cerrando en el mediocentro cuando el equipo bascula para defender su flanco izquierdo. Paralelamente a este desplazamiento buscando al lateral -en este punto la presencia en el lateral zurdo de Fabio Aurelio parece más interesante que la de Arbeloa- Riise debe realizar un desmarque hacia el centro para arrastrar a Maicon y dejar todo el carril para el ex lateral del Valencia, quien por otro lado, tiene una técnica más depurada a la hora de intentar el centro.
Alineación:
25Reina-3Finnan-37Skrtel-23Carragher-12F.Aurelio-8Gerrard-20Mascherano-14Alonso-6Riise-9Torres-10Voronin.