Cuatro apuntes del Madrid-Barça (1/2)
1- El primer clásico del Barça de Vilanova:
Cuando Barça y Madrid se enfrentaron en la primera vuelta de la Liga, el equipo de Vilanova aún no había arrancado. De hecho lo hizo a partir de ese partido, punto de partida de las propuestas y novedades que se reflejan ahora en el líder de la competición. Aquel era un equipo todavía muy “tardoguardioliano” un conjunto en construcción. Este es uno de los principales alicientes del nuevo enfrentamiento entre los dos grandes. Son los mismos equipos, pero uno de los dos es otro.
La principal novedad del Barça de Vilanova será la banda izquierda. Es cierto que justamente ante el Madrid fue la primera vez que coincidieron en un once liguero Xavi, Cesc e Iniesta con el de Albacete como falso extremo izquierdo, pero también lo es que por aquel entonces, no se trataba del mecanismo integrado y consolidado que es hoy en día. Ahora es parte fundamental del discurso futbolístico del Barça.
Desde que está al frente al Madrid, Mourinho ha basado sus planteamientos defensivos ante el F.C.Barcelona en la defensa sobre el perfil central. La zona que juntaba a Messi con Xavi e Iniesta. Ahora ya no podrá hacerlo. El perfil fuerte del Barça de Vilanova es el izquierdo gracias al remolino que genera la sociedad Alba-Cesc-Iniesta. Pero por dentro estará Messi. Los blancos se verán obligados a diversificar atenciones muy separadas entre ellas. Arbeloa necesitará el auxilio de hombres más interiores para hacer frente a Alba, Cesc e Iniesta. Pero por dentro estará Messi.
Este nuevo Barça, no sólo afectará a los blancos a la hora de defender, sino también cuando ataque. El Madrid está diseñado para llevar la transición por banda izquierda. Sobre ese perfil caen Marcelo, Xabi Alonso y Cristiano Ronaldo, mientras que en la derecha están Arbeloa, Khedira y Di María/Callejón. El peso de la banda izquierda azulgrana, sin embargo, es probable que vuelque al Madrid sobre el lado derecho cuando no tenga el balón. Tras recuperación, pues, la transición buena quedará en la otra orilla, lo que restará velocidad, mientras que la opción rápida será la que implique a hombres de menor calidad. Quizá eso haga que Mou se plantee a Özil en banda derecha.
2- La ausencia de Di María:
Ángel Di María es una navaja suiza. Un día extremo, al otro interior y al tercero mediapunta. Cuando conviene ataca el espacio, desborda, abre su posición o la cierra, o persigue al lateral de turno Te sirve para casi todo y por eso ha sido un fijo para Mourinho desde su llegada a Madrid. Su actual temporada está siendo irregular -es un eufemismo- e incluso ha llegado a caerse de los onces. Pero últimamente parecía que volvía y eso a las puertas de un clásico es una extraordinaria noticia para Mou. Su baja por sanción, sin duda, será un dolor de cabeza para el técnico.
La versatilidad del futbolista argentino se ha hecho evidente en los partidos que lo enfrentaron al Barça. En algunos le tocó bailar con Dani Alves, bien para perseguir al brasileño cuando éste subía al ataque, bien para castigarle en el uno contra uno. Otras veces su lugar estuvo en banda derecha, como tercer centrocampista, pendiente de auxiliar a Khedira en la defensa sobre Andrés Iniesta. En el partido de la primera vuelta, se emparejó con Jordi Alba en un duelo que, con Iniesta y Arbeloa ocupando zonas centrales, monopolizó toda la banda. Dependiendo del escenario planeado, el técnico usa a un Di María o a otro. Por eso elegir su recambio el miércoles obliga a varias consideraciones.
De entrada, lo esperaríamos en banda derecha. El perfil de Alba-Cesc-Iniesta obligará a un esfuerzo defensivo grande, y en ese apartado, Di María siempre suma mucho. Sin él, el perfil de extremo más parecido quizás sería Callejón. Replicaría el trabajo defensivo del Fideo aunque en ataque sean tan diferentes. Sin embargo, la -para Mourinho- nueva banda izquierda del Barça, plantea otro escenario posible.
La necesidad de acudir con más efectivos a defender la banda y el peligro de que con eso se generen nuevos espacios a un Leo Messi que no tendrá en frente a la pareja Pepe-Ramos, abre la posibilidad del 4-3-3. Modric o Essien podrían ser los nombres que optasen a esa nueva plaza en la media. Por su parte, arriba, Özil esperaría como falso extremo, castigando el espacio entre Alba y Busquets, y con salida hacia dentro para encarar la asistencia.
Pingback: Cuatro apuntes del Madrid-Barça (2/2) | En un momento dado 30 enero, 2013
Carlos 30 enero, 2013
Muy buenos apuntes Moren!!