
Todo parece indicar que desde un principio, los hombres de Manolo Jiménez entregarán el balón y la responsabilidad de llevar el peso del partido al Madrid, conocedores de los problemas que tiene el conjunto blanco cuando debe afrontar los partidos tratando de llevar peligro a la portería rival desde una situación de posesión del esférico en ataque estático. A partir de este planteamiento inicial, la estrategia de los andaluces será la de tratar de recuperar rápidamente apoyándose en la agresividad y el dinamismo de hombres como Alves, Poulsen, Keita o Capel, y buscar contraataques rápidos a partir de un balón largo a Kanouté para que éste ejerza de boya y organice la contra sevillista. Por banda derecha, el peligro hispalense recaerá en Navas y Dani Alves sobrecargando la banda de Marcelo, con Poulsen tapando la espalda de Alves y Keita abarcando la zona de rechace gracias a su tremendo derroche físico. En la defensa que el Real Madrid haga de esta situación puede estar la clave del partido. Si la alternativa escogida por Schuster para tapar las subidas del lateral brasileño es la de obligar a un Robinho todavía no al 100% después de regresar de una lesión a seguir a Alves, es probable que a partir del minuto 60 el delantero merengue baje considerablemente a nivel físico, obligando al técnico alemán a una sustitución o a prescindir de uno de los hombres más desequilibrantes del equipo en fase ofensiva. La segunda opción, pues, pasa por destinar para la función de igualar fuerzas en banda izquierda a uno de los interiores, y entre Guti o Sneijder, el hombre más indicado, sin duda, sería el holandés. Esta situación, puede beneficiar mucho a los blancos, ya que con Alves volcado en ataque y Robinho liberado de la defensa sobre el lateral, en caso de robo de balón, el espacio dejado por Alves a su espalda podría ser el camino principal para llevar peligro a la portería de Palop. Es por todos conocido que cuando Alves se suma al ataque, el encargado de ocupar su demarcación en el lateral es el danés Poulsen, pero este movimiento deja en clara inferioridad numérica a la media sevillista, con un solo hombre -Keita- frente a dos, tres o hasta cuatro centrocampistas rivales. Así pues, con el Sevilla atacando por banda derecha, el Real Madrid deberá buscar aprovechar esta superioridad generada por la ayudas de Poulsen a su defensa, con la intervención de Guti y Baptista. Así, situando a estos dos futbolistas de manera escalonada -Baptista por delante de Guti, prácticamente actuando de referencia ofensiva- a medio camino entre la espalda de Keita y la línea defensiva del Sevilla, si Manolo Jiménez no quiere dejar solos a dos futbolistas que pueden causar mucho daño a la contra -uno como asistente y el otro como finalizador- deberá tratar de igualar fuerzas en esta posición, tanto retrasando la posición del centrocampista Malí, como centrando a Poulsen dejando el carril libre para Robinho en caso de recuperar el balón con Alves en fase ofensiva. Una tercera opción para el Sevilla consistiría en ordenar a uno de los centrales que saliese al encuentro de estos dos jugadores, lo cual propiciaría una situación muy peligrosa para la zaga hispalense que trataremos más adelante analizando de que modo puede dañar el Madrid a la zaga del Sevilla en el contexto de un ataque estático.
También en ataque Sergio Ramos debe tener un peso específico en el partido frente al Sevilla ya que con sus incorporaciones por banda, el Madrid debe tratar de abrir a la defensa rival y fijar a Adriano en una posición cercana a banda. En los últimos días se viene especulando con la posibilidad de que Bernd Schuster de la titularidad en ataque, junto a Robinho y Raúl, al argentino Higuaín, lo que permitiría al equipo atacar por los tres carriles del ataque y a la vez disminuiría las obligaciones ofensivas de Ramos. No obstante, desde EUMD apostaríamos por Baptista en lugar de Higuaín, ya que para afrontar un partido en que presumiblemente el equipo merengue deberá llevar el peso del partido, la aportación del brasileño puede resultar fundamental en el éxito atacante de los blancos. Con Higuaín, el equipo encuentra un delantero muy peligroso con espacios a la espalda de la defensa, pero con escaso desborde en el uno contra uno en banda, y como punta, su perfil se aleja mucho del de un ariete referencia que fije a la defensa del adversario para posibilitar que Raúl tenga libertad para buscar los espacios libres. Así pues, recomendaríamos la presencia de Baptista de falso nueve, formando pareja atacante con el capitán blanco. La función que el brasileño debe desempeñar ante el Sevilla es parecida a la que en el otro lado realizará Kanouté, es decir, salir de la posición de delantero centro buscando la espalda de Poulsen para arrastrar a uno de los dos centrales -lo más probable es que Mosquera siga el marcaje y Escudé se quede atrás ejerciendo como líbero-. Ante esta situación, tanto Alves como Adriano tienen problemas para estrechar el campo y cerrar los pasillos interiores en defensa -más si tenemos en cuenta que Robinho y Ramos abrirán el campo por bandas- de los que tan bien puede aprovecharse un delantero del instinto y la inteligencia de Raúl, con desmarques cortos saliendo de la posición de uno de los centrales, buscando el espacio dejado por el defensor que sale al encuentro de Baptista. Por este motivo, aunque el juego de espaldas no es ni mucho menos uno de los fuertes del juego de Baptista, apostaríamos por el brasileño en el once en detrimento de Higuaín, quedando el argentino en el banquillo como una alternativa en caso de ir a buscar el partido introduciendo a otro atacante o, sobretodo, con el marcador a favor, buscando sentenciar en una contra.
Alineaciones:
*Finalmente el central del Sevilla Escudé no ha entrado en la lista de convocados a causa de problemas físicos, por lo que su plaza en el once deberá ser ocupada por David Prieto, Fazio o incluso el lateral Crespo. En el Real Madrid, la baja de última hora la protagoniza Pepe tras recibir un fuerte golpe en la tibia en el partido que disputó con la selección portuguesa. Así pues, todo apunta a que Schuster formará en el centro de la zaga con Cannavaro y Heinze, dos centrales de poca estatura que convierten la presencia de Diarra en el mediocentro en imprescindible, ante el peligro en el juego aéreo de Kanouté.
