Real Madrid: Planificación deportiva (I). El salto de calidad.

Real Madrid: Planificación deportiva (I). El salto de calidad.

Termina el año y es el momento en que las secretarías técnicas de los equipos se sientan para discutir y analizar la situación de las plantillas, y cuando deciden y trazan las líneas maestras hacia donde irá su planificación deportiva. Si bien es cierto que quedando muchos meses de competición por delante y que todavía quedan muchos aspectos referentes a situaciones puntuales de algunos jugadores por concretar, si pueden detectarse los principales campos de mejora del equipo. En el caso que nos ocupa, el Real Madrid, esta temporada, a diferencia de lo que sucedió en la anterior pese al título de Liga, ha logrado conjuntar un verdadero equipo con jugadores de rendimiento en cada una de las líneas y interesantes alternativas en gran parte de las posiciones del once. Así pues, con alguna excepción en que profundizaremos en próximas entregas sobre la planificación merengue, el Real Madrid no parece que deba afrontar el mercado de fichajes al encuentro de un alto numero de incorporaciones, sino que el objetivo deben ser pocos fichajes pero de calidad.

De esta manera, para dar un paso más en su evolución como equipo, entendemos que el principal objetivo del equipo blanco debe ser el de contratar a un jugador desequilibrante en ataque, capaz de resolver un partido o una eliminatoria con una sola acción, de desencallar un mal partido del equipo y guiar a sus compañeros en las grandes citas; de llegar por si solo donde el equipo no llegue. En definitiva, lo que comúnmente denominamos un crack.

En el actual 1-4-3-3 del Madrid, su plaza parece reservada a uno de los tres puestos de arriba ya que para poder ofrecer su máximo potencial en ataque debemos minimizar sus responsabilidades defensivas. El perfil del jugador a buscar, pues, es el de un jugador de una edad comprendida entre los 23 y los 28, es decir, un jugador confirmado, que haya demostrado anteriormente que es capaz de ejercer de líder en todo un Real Madrid, pero que a la vez pueda disfrutar de recorrido en la entidad durante unos cuantos años -no buscamos una solución inmediata sino la edificación y consolidación de un proyecto ambicioso-. Futbolísticamente debe tratarse de un jugador veloz, habilidoso en el uno contra uno, con gran cantidad de recursos ofensivos, buen dominio con ambas piernas para, así, poder sorprender al rival por cualquier frente del ataque, capacidad para asistir a sus compañeros -más si se confirma la presencia de Diarra, Sneijder y Baptista en un mediocampo muy fuerte y potente pero poco dotado para la organización- y para definir a gol ante el portero.

Las opciones que podría presentar el mercado requieren un importantísimo esfuerzo económico ya que en un fútbol como el actual, donde la igualdad es la nota predominante y el equilibrio el camino del éxito, contar con un jugador que aporte desequilibrio sobre el césped supone una gran ventaja respecto a tus rivales. Es difícil recordar, salvo el caso de Shevchenko, el traspaso de un jugador de estas características entre equipos del máximo nivel, ya que si desprenderse de un futbolista desequilibrante es ya peligroso para el equipo que lo deja marchar, mayor es el riesgo si el club de destino es un posible competidor en la lucha por los grandes títulos. Otras excepciones de movimiento de jugadores determinantes como los casos de Ballack, Henry o Ibrahimovic, poseen condicionantes peculiares como es el vencimiento del contrato en el caso del primero, un pacto de caballeros entre directiva, técnico y jugador en el segundo y el descenso de la Juventus en el del delantero sueco del Inter. Así pues, las opciones más apetecibles para el gran público y para la propia cúpula directiva del Real Madrid por su tirón mediático, como podrían ser las de Kaká o Cristiano Ronaldo, los actuales dominadores del fútbol mundial -con el permiso del azulgrana Leo Messi- se presumen altamente remotas. Ambos son futbolistas jóvenes que aún darán muchos años de rendimiento a sus clubes, y alrededor de los cuales se contsruye el proyecto deportivo de dos colosos del fútbol europeo como el Manchester y el Milán.

Tanto el portugués como el brasileño, se adaptarían perfectamente a la posición de extremo con libertad de movimientos que viene utilizando Schuster para acompañar al holandés Van Nistelrooij, siendo de gran importancia en la tarea de abrir el marcador y desequilibrar ante defensas cerradas atrás, aspecto en el que debe contarse, también, su potencial a balón parado. Por otro lado, con el marcador a favor, y la obligación del rival a adelantar líneas y tomar mayores riesgos, su velocidad, exquisita conducción, habilidad en el regate y visión de juego, convertirían el contraataque blanco en una arma letal.

La opción EUMD: Diego Ribas.

Puesto que las posibilidades de lograr las incorporaciones de alguna de las estrellas de los principales equipos del continente se presume difícil y en caso de producirse es dudosa la capacidad del club para hacerse cargo de los costes, el objetivo de la secretaría técnica será el de buscar un futuro crack aún por explotar definitivamente, propiedad de un club perteneciente a un segundo escalón a nivel europeo. Esta opción, implicará también un coste elevado, aunque claramente inferior a las opciones comentadas anteriormente, por lo que se debe huir de riesgos innecesarios y centrarse en futbolistas que ofrezcan garantías en su rendimiento, que hayan demostrado ya que son capaces de rendir al nivel que se les exigirá y a los que no les tiemblen las piernas cuando un estadio como el Bernabeu espere que una acción suya decida un partido, una eliminatoria o un título.

Jóvenes promesas como Nasri, Benzema o Kranjcar, tienen un brillante futuro por delante pero aún les queda camino que recorrer para demostrar que pueden ser verdaderas referencias mundiales. En el caso del primero, este año, con la salida de Ribery rumbo al Bayern de Munich se le abría la oportunidad de ejercer como única estrella de su equipo, una situación que debe servirle para crecer y confirmar el talento que se le intuye desde hace años. Curiosamente, la confirmación de Diego Ribas viene provocada también por el fichaje de la estrella del equipo por el Bayern Munich, en este caso el delantero Miroslav Klose. No obstante, Diego ha demostrado personalidad y calidad para ponerse el equipo a la espalda y guiar a sus compañeros tanto en la Bundesliga como en la Liga de Campeones, haciendo crecer su fútbol y beneficiándose de la marcha del delantero internacional por Alemania.

Se trata de un mediapunta imaginativo, con una exquisita técnica individual, gran capacidad para inventar un regate mágico, un pase imposible o un remate espectacular. Con él, el Real Madrid contaría con un jugador capaz de desequilibrar tanto con un pase como con un regate, nada reñido con el gol y con una alta peligrosidad en el lanzamiento de faltas. Además, Diego podría adaptarse a varios roles dentro de los planteamientos de Schuster. Su demarcación más indicada en el actual 1-4-3-3 del técnico alemán sería la de extremo con liberad, preferiblemente en banda derecha ya que no es un futbolista que guste de llegar hasta línea de fondo, de manera que dejaría libre la banda para las subidas de Sergio Ramos. No obstante, si el Madrid quisiera recuperar el 1-4-4-2 de principio de temporada, el mediapunta brasileño podría adaptarse a una posición de inicio pegado a banda, para evolucionar hacia un posicionamiento dinámico, al más puro estilo Capello con Raúl en su primera etapa en el Madrid, Nedved en la Juventus o Guti en el tramo final de la temporada pasada. Otra alternativa podría ser un 1-4-3-1-2 semejante al empleado por Mourinho la temporada pasada, en que Diego formaría por detrás de dos delanteros (Van Nistelrooij y Raúl) y por delante de una línea de tres medios que realizarían la mayor parte del trabajo defensivo. Porqué eso sí, uno de los campos en que más puede progresar Diego es en su comportamiento defensivo. Es cierto, no obstante, que tras perdida del balón se muestra sacrificado y agresivo en la presión, pero una vez el rival ha superado esta primera fase de la defensa, tiene dificultades para el repliegue defensivo. Por si fuera poco su adaptación a la Liga Española, presumiblemente, no seria difícil ni tampoco su aclimatación al vestuario dónde se encontrará a compatriotas de selección como Baptista, Marcelo o Robinho, con quién lideró el Santos brasileño, o a ex-compañeros como Pepe con quien coincidió en el Porto.

*Debido a que su reciente fichaje por el Valencia C.F. sitúa a Ever Banega en la primera línea de la actualidad, adjuntamos el enlace a un post del mes de septiembre en que realizábamos un repaso a su trayectoria y analizábamos sus características futbolísticas.

Remember the name: Ever Banega.