Isaac Cuenca, el más extremo de todos
Desde que Guardiola está al mando del equipo, el contar con una plantilla corta ha sido la norma. Mayor facilidad para repartir minutos y evitar que algún jugador se sienta apartado, homogeneización de niveles para evitar relajación en los teóricos titulares y la posibilidad para los jóvenes del filial de ver siempre la puerta del primer equipo abierta. El nivel de éstos, además, es una garantía para el cuerpo técnico, que sabe que si los necesita, los jóvenes responderán. Busquets, Pedro, Fontás, Thiago, Dos Santos, Sergio Roberto, Bartra, Muniesa, Montoya...
El reto de Pep: la columna del 87
Quizá obligado por el inimaginable éxito de su primera temporada al frente de la primera plantilla del F.C.Barcelona en la que conquistó los tres títulos a los que aspiraba, cada temporada Guardiola ha lanzado un reto a su plantilla. Se trata de introducir alguna novedad que renueve la motivación del grupo, que obligue al jugador a esforzarse para asimilar nuevos conceptos para que el objetivo sea el día a día y no el largo plazo. En agosto de 2009, cuando el equipo iniciaba la temporada post-triplete, en En un momento dado escribimos: "La motivación será siempre la de ganar, pero los objetivos, aquello en lo que debe pensar el futbolista a lo largo de la semana, antes de saltar al césped o cuando el balón empieza a rodar, deben ser cada uno de los principios técnicos, conceptos tácticos o actitudes competitivas que posibilitarán finalmente conseguir la victoria."
Primero fue la prueba de la salida de tres incrustando al mediocentro entre centrales y el cambio en el perfil del delantero centro con la llegada de Ibrahimovic, y la pasada temporada, tras la marcha del sueco, la nueva posición de Leo Messi como falso delantero centro. El objetivo es sumar nuevos estímulos a los jugadores para seguir creciendo. Seguir mejorando respecto al año anterior. En esta línea, Guardiola ha puesto en práctica este inicio de temporada el esquema 1-3-4-3, aunque atendiendo a la composición de la plantilla y a las dudas sobre su viabilidad ante rivales del máximo nivel, en este post vamos a exponer una alternativa al cambio de sistema que permita al Barça de Guardiola seguir creciendo en su fútbol. Ésta pasa por potenciar el juego y la influencia de los miembros de la generación del 87, Piqué, Cesc y Messi.
Un Sevilla que quiere volver a ser grande
Pese a que el mal momento de sus competidores permitió al Sevilla mantenerse en posiciones de Champions, lo cierto es que desde el final de la etapa de Juande Ramos en el banquillo hispalense, la nota predominante en el equipo andaluz han sido las dudas, la irregularidad y un evidente empobrecimiento futbolístico. La apuesta por los técnicos y por unos jugadores que debían reemplazar a los pilares del histórico equipo que logró -entre otras- dos copas de la UEFA, no dio el resultado esperado. Esta temporada, no obstante, parece que el Sevilla si ha dado con la tecla con la elección de Marcelino García Toral como encargado de dirigir al equipo. Con contrincantes de la talla del consolidado Valencia de Emery, el ilusionante Atlético de Madrid de Diego o Falcao, la llegada de Bielsa a Bilbao, la aparición del Málaga o lo que queda del Villarreal, da la impresión que no había mejor momento para apostar fuerte por volver a construir un proyecto grande.
Iniesta 2011-2012
Después de una temporada 2009/10 marcada por los continuos problemas con las lesiones, la pasada fue la temporada de la recuperación de Andrés Iniesta. Jugador vital la temporada del triplete, y ausencia clave para explicar el juego discontinuo en la 09/10, en la tercera temporada de Guardiola al frente de la nave culé, Iniesta volvió a ser uno de los futbolistas clave en los éxitos culés. Debido al fichaje de Villa y la consolidación de Pedro, sobretodo tras la incorporación en invierno de Ibrahim Afellay, la posición del manchego se asentó en el interior izquierdo del equipo, posición desde la cual mayor rendimiento ha ofrecido a las ordenes de Guardiola. Ya lo hizo en la primera temporada del técnico, una vez que Pep encontró acomodo a Henry en el extremo izquierdo, permitiendo al de Fuentealbilla grandes espacios por el interior. Desde éstos, su entendimiento con Xavi y Busquets en el triangulo del medio campo, su facilidad para generar siempre una línea de pase a su compañero, su visión en el último pase y, sobretodo, la facilidad con la que acelera la jugada valiéndose de su desborde en el uno contra uno, lo convierten en un jugador que suma en cada jugada y prácticamente imposible de controlar por sus rivales.
Dossier: El fichaje de Cesc Fàbregas
El interminable culebrón que ha supuesto el fichaje de Cesc Fàbregas por el F.C.Barcelona, este verano finalmente llegó a su fin y dio con el de Arenys en su club de formación. Antigua petición de Guardiola, con Cesc, el Barça
Las mil caras del fichaje de Cesc Fàbregas (4/4)
La vuelta del 4:

La recompensa del gol
Las dos últimas victorias en el Calcio deben llevar la tranquilidad a la Roma de Luis Enrique tras unos primeros pasos muy negativos en los cuales cabe contar, además, con la eliminación europea a manos del desconocido Slovan de Bratislava. Sin duda, los malos resultados iniciales no dibujaron el escenario ideal para dar tranquilidad a un nuevo proyecto que todavía debe tomar forma y encaje a las numerosas incorporaciones realizadas. Stekelenburg, Heinze, Kjaer, Jose Ángel, Gago, Pjanic, Osvaldo o Bojan Krkic, son algunos de los nombres que este verano han llegado al conjunto romano. El ex-azulgrana, en una operación peculiar más cercana a una cesión que a un traspaso, busca reencontrar en Italia la confianza perdida en sus últimas temporadas en el F.C.Barcelona.
Tres detalles del Sporting-Barça
- Sin Cesc ni Iniesta, Pedro completa el rombo:

Las mil caras del fichaje de Cesc Fàbregas (3/4)
La defensa de 3 y "la transición de Cruyff": Hasta ahora hemos analizado dos opciones para incluir a Cesc en el once, en las que esta entrada se producía en el lugar de uno de los delanteros, ya fuese para adelantar