De los 90 a 2014
Luis Enrique quería el balón consciente que el Madrid podía quitárselo. Desde que terminara la era del Barça de Guardiola y Xavi, la vara de medir en los clásicos forzosamente debe ser otra, pues tanto culés como merengues tienen, ahora, posibilidades de
Brasil estuvo eliminado
Brasil es el país que más Mundiales ha ganado, y el actual lo juega en casa. Si llevar la verdeamarelha nunca ha sido cualquier cosa, en esta ocasión cada gramo de tela es como si pesara un kilo, y cada
Una banda y dos bandos
Los dos están pisando menos banda de lo que se podía intuir. Durante el año, en el Barça comparten cartel con el mejor de todos, pero en su selección son el centro, la estrella, el jugador a potenciar. Alexis Sánchez
Activar a Messi en el Bernabéu
Desde que Messi recogió el testigo de Ronaldinho como 10 y estandarte del primer equipo del F.C.Barcelona, gran parte de la batalla en los clásicos ante el Real Madrid se disputa en sus botas. No por lo que pueda hacer
Ventaja para Martino
Se enfrentaban dos proyectos que empiezan. Dos equipos por hacerse, con dudas, algunas certezas y varias incógnitas por resolver. Dos proyectos que aspiran a todo. Son Barça y Madrid. Se estrenaban dos entrenadores, Carlo Ancelotti y el Tata Martino. Los
Cuatro apuntes del Madrid-Barça (2/2)
3- Pedro + Alexis:
Es evidente que el partido de esta noche viene marcado por las ausencias en el Madrid. No estará Casillas, ni Di María, ni la pareja Ramos-Pepe, ni Coentrao. Quien si estará es Marcelo, pero llega más que justo. Con Coentrao disponible no habría dudas. Tampoco sin el rival fuera otro. Pero Mourinho tiene lo que tiene y jugársela ahí con Essien parece demasiado temerario teniendo en cuenta los acompañantes que tendrá. En el ataque azulgrana, todas las miradas estarán puestas en Messi y la efervescente banda izquierda de Alba, Cesc e Iniesta. También el sistema defensivo blanco. Por eso, en la posición del maltrecho lateral brasileño, al Barça se le abre una nueva posibilidad de desequilibrio.Vuelve Pepe, mueve Tito.
Más allá de que ambos conjuntos aún están prácticamente en pretemporada, uno de los factores que marcó la previa del partido de ida fue la ausencia de Pepe. Desde que Mourinho está en el banquillo del Madrid, gran parte de los Barça-Madrid podría explicarse a partir del emparejamiento entre el portugués y Leo Messi. Sin Pepe en la ida, el Barça tomó la ventaja para levarse la Supercopa y a punto estuvo de sentenciarla.
El marcador desfavorable y la vuelta de Pepe, provocarán que casi con total seguridad el Madrid adelante líneas para plantear la presión adelantada. El Barça ya no es aquel equipo indefendible en el inicio de la jugada, y los atacantes del Madrid, a la contra, son demoledores.
La semana del Clásico(II): Las novedades
Repasábamos en el anterior post cómo fueron los duelos entre Barça y Madrid de la pasada temporada, deteniéndonos en los aspectos fundamentales de los planteamientos de ambos técnicos y cómo el movimiento de uno de los entrenadores tuvo la respuesta del otro. Así pues, de cara al partido del sábado, no esperamos reencontrarnos con un escenario idéntico al de entonces, tanto por las novedades que tanto Mourinho como Guardiola puedan introducir específicamente para el clásico, como por las novedades que a lo largo de la temporada han presentado ambos conjuntos con el objetivo de subir el nivel de la pasada temporada.
El Real Madrid, para abandonar los problemas que encontró la pasada temporada ante rivales que le cedían el balón y le obligaban a atacar en posicional, ha introducido una serie de cambios buscando imponerse también es estos escenarios. La principal novedad se concentra en Xabi Alonso, quien al inicio de la jugada baja hasta situarse entre centrales, reproduciendo la salida lavolpiana que tantas veces ha intentado implantar Guardiola en su Barça. Alonso, desde esa posición al inicio de la jugada, es quien, no sólo está comandando el juego del equipo, sino de quien depende la posición en el campo de sus compañeros. Para profundizar en el nuevo rol de Alonso y en cómo éste repercute sobre el comportamiento de sus compañeros, recomendamos el extraordinario trabajo de los compañeros del blog Ecos del Balón.
La final de Mourinho (II)
En el partido de Liga, el Real Madrid, de la mano del planteamiento de Mourinho, logró maniatar al juego del Barça. No obstante, es de esperar que de cara al partido de mañana, Guardiola haya encontrado solución a algunos de los problemas del equipo en el Bernabéu y además cuenta con una calidad individual tal, que es capaz de hacer saltar por los aires cualquier estrategia defensiva rival -aunque la presencia de Pinto en lugar de Valdés, pueda pesar, sobretodo, a la hora de iniciar el juego-. Ahí estará, también, la carta Iniesta, a la cual, entendemos, no supo sacar provecho en el partido del sábado.
Por eso, jugar a "contener" al Barça siempre es arriesgado. Cedes la iniciativa a los azulgranas, entendiendo tu juego como una reacción y quedando a la expectativa de la inspiración de los culés. Así pues, Mourinho deberá plantearse también, o en todo caso tenerlo presente como recurso dependiendo del transcurso de la final, la manera de dañar al Barça. Más allá de sus siempre peligrosas contras o de su superioridad a balón parado, el Madrid deberá tener un plan para que, con su juego, impida al Barça desplegar su discurso cómodamente. Y al Barça, como se le hace daño es con el balón. No hablamos de robarle el dominio de la posesión, pues eso es algo imposible para cualquier equipo del mundo, pero si de condicionar con el esférico.
La final de Mourinho (I):
El partido de Liga en el Bernabéu nos deparó una propuesta novedosa de Mourinho para hacer frente al Barça de Guardiola. Como hiciera ante el Athletic, aunque con unas funciones muy distintas, Pepe se situó por delante de los centrales. Mou no solo sumaba un hombre más al centro del campo y una marca agresiva sobre la posición de Leo Messi, sino que permitía al Madrid un menor sufrimiento cuando no tenía el balón. Khedira y Alonso sobre Iniesta y Xavi respectivamente, y Pepe trabajando la "zona Messi" para expulsar al Barça de la zona de tres cuartos de campo. Con unos Villa y Pedro que no intimidaron los suficiente la espalda de la zaga blanca, ésta pudo jugar adelantada, minimizando los espacios entre líneas y permitiendo que el partido se jugase más lejos de la portería de Casillas de lo que el Barça hubiera deseado.
