Análisis de la eliminatoria entre United e Inter (I)
Este mediodía, el sorteo de los cuartos de final en Nyon centrará el debate de los próximos días en futuros duelos, y como el fútbol por encima de todo es presente, se pasará página de los partidos disputados en la ronda anterior. No obstante, antes de que esto suceda, creemos interesante analizar una de las eliminatorias más interesantes que deparó la ronda anterior, la cual, debido a que destinamos una mayor atención a los enfrentamientos protagonizados por los dos grandes de la liga española, quedo fuera de nuestro estudio. Se trata del duelo protagonizado por los dos equipos que, con permiso del Liverpool de Benítez, reunían más cualidades para alcanzar la final en Roma, por un lado el actual campeón, el Manchester United, y por el otro el Inter, eterno aspirante frustrado pero que con la llegada de Mourinho confiaba en alcanzar, esta vez si, sus objetivos en competición europea.
No fue una eliminatoria desnivelada como desde algunos sectores se ha argumentado, sino que la igualdad entre dos equipos extraordinarios reinó durante la mayor parte de ambos partidos. De hecho, las crónicas dieron como vencedor -no en lo referente al resultado sino en lo puramente futbolístico- al United en el partido de ida y al Inter en el de vuelta, un análisis basado básicamente en el número de ocasiones de gol, pero que olvida otros aspectos que condicionan que nuestra visión sea diametralmente opuesta. Así pues, en este post trataremos de diseccionar cada uno de los dos partidos de la eliminatoria y analizaremos aquellos aspectos más interesantes y que más puedan ayudar a discernir el desarrollo real de la batalla librada entre ingleses e italianos.
Sangre, sudor y lagrimas.
Séptimo lanzamiento de penalties, Van der Sar frente a Anelka, el destino del campeón de Europa encerrado en el duelo entre el portero holandés y el atacante francés. El delantero toma poca carrerilla, pica el balón con pierna derecha, suave, buscando engañar al guardameta, a media altura... Van der Sar adivina la dirección del lanzamiento y detiene el disparo decisivo que da la tercera Champions al United y la segunda a Ferguson, en una temporada para enmarcar culminada con una final que tiñe de rojo la capital rusa. El desenlace nos deja a un United victorioso, exultante de felicidad y saboreando la gloria de llegar a lo más alto, y a un Chelsea cabizbajo, desconsolado y vencido. Hasta llegar a ese punto ambos equipos han ofrecido una gran lección de fútbol en un partido, que si bien no ha sobresalido por un juego brillante, ha enfrentado a 22 guerreros dispuestos a darlo todo por un único objetivo. No ha faltado de nada: goles, ocasiones, balones a la madera, peleas, sangre, expulsiones... todo lo que se le puede pedir al partido que cierra la temporada en lo que a competiciones de clubs se refiere y en el que se decide el mejor equipo del continente.
Final de la Champions League: Manchester United vs.Chelsea
Otro título en juego y otra vez United y Chelsea dispuestos a pelear hasta la extenuación para lograr una Champions por la que ambos conjuntos llevan mucho tiempo luchando. Se repetirá, pues, la pelea por el campeonato en la Premier que no se resolvió hasta la última jornada, donde el Manchetser, haciendo valer la mínima ventaja que le otorgaba la diferencia de goles, revalidó el título conseguido la temporada pasada, logrando vencer por décima vez desde la fundación de la Premeir League hace 16 años. En Europa, no obstante, pese a ser uno de los clubs más poderosos tanto a nivel deportivo como económico en los últimos años, desde el título logrado en 1968, tan solo ha logrado levantar la "orejona" en una ocasión, en la eternamente recordada final de 1999 ante el Bayern Munich en el Camp Nou, en que remontó el gol de desventaja que reflejaba el marcador en apenas tres minutos, en pleno tiempo añadido con dos goles a saque de esquina de Sheringham y Solskjaer. En esa ocasión los de Ferguson también habían logrado conquistar el campeonato doméstico, alcanzando así un doblete que anhelan repetir esta temporada. En frente, no obstante, esperará el Chelsea de Abramovich que tras tres intentos fallidos, tratará de conquistar el título para el cual ha sido diseñado este equipo. Curiosamente, con José Mourinho en el banquillo diversas situaciones alejaron a los blues de la tan ansiada final, lo que acabó condenando al técnico luso y dando el relevo al desconocido Abraham Grant. El israelí, junto a Ten Cate, ha situado al equipo en la gran final el año que, curiosamente, el ciclo del Chelsea parece tocar a su fin y todo apunta a que tanto el técnico como un gran número de jugadores abandonaran el equipo a final de temporada.
Manchester United vs. F.C.Barcelona
Acababa el partido en el Camp Nou y todo quedaba pospuesto para Old Trafford. El empate a cero en el marcador poco o nada clarificaba. Tras el choque, el Manchester no parecía tan fiero como lo pintaban, el Barça menos muerto y el crack Cristiano Ronaldo ya no asusta como hace apenas una semana. La realidad, no obstante, no ha cambiado: los de Ferguson siguen siendo los máximos favoritos, Ronaldo es un jugador determinante capaz de decidir la eliminatoria él solo, y en el Barça apura los últimos coletazos del ciclo un coloso que podía haber marcado una época y grabar para siempre su nombre en el Olimpo futbolístico. No obstante, y como ya dijimos en el partido de ida, calidad les sobra, y a un partido es capaz de salir airoso de cualquier enfrentamiento. A su favor, el cero a cero de la ida ya que, si bien nunca puede considerarse positivo un empate en casa en una competición de eliminatorias, el equipo salió vivo y con la moral reforzada de un partido en que todo el mundo preveía un paseo militar de los diablos rojos. Queda un partido menos para levantar la tercera Champions de la entidad y la segunda de este equipo, y el escenario previo al partido no podría estar más igualado.
F.C.Barcelona vs. Manchester United:
La temporada alcanza su fin y con él llega el momento en que se deciden los títulos. Con la Liga virtualmente en propiedad del Real Madrid y la Copa del Rey en manos del Valencia, al F.C.Barcelona sólo le queda agarrarse a la Champions, que no es poco, para lograr la primera satisfacción de las últimas dos temporadas. Con la presencia de innumerables rumores en los medios de comunicación sobre nuevos fichajes, traspasos sonados, novedades en el cuerpo técnico y un entorno algo convulso, no parece que sea el mejor momento para creer en que el equipo es capaz de conseguir, en Moscú, la tercera Champions League de su historia, más si tenemos en cuenta que para llegar a la gran final primero tendrá que superar al que posiblemente haya sido el equipo más en forma de las ultimas dos campañas, el Manchester United. Los de Ferguson, con la Premier en el bolsillo, tratarán de rememorar el doblete conseguido el año 1999 en que levantaron la Copa de Europa en una final inolvidable contra el Bayern de Munich, precisamente en el Camp Nou. Ya la temporada pasada el Manchester se quedó a las puertas de lograrlo, pero llegados a las semifinales frente al Milan de Kaka', las bajas por lesión de hombres claves en el esquema inglés y la maravillosa exhibición del crack brasileño, les apartaron de disputar la final en Atenas. Visto esto, se podría creer que el Barça lo tiene todo perdido, e incluso parte de su afición no acaba de confiar en la clasificación de su equipo. En esta situación es donde el equipo debe hacerse fuerte. Pocos dan un duro por ellos, la limpia a final de temporada parece segura, y ante los jugadores aparece la eliminatoria contra el United como la gran oportunidad de reivindicarse como futbolistas y reclamar un sitio en el nuevo proyecto. En esta semifinal, los de Rijkaard tienen muy poco que perder y mucho que ganar, y esto, como ejemplificó la final de la Copa del Rey, puede dar un impulso definitivo al conjunto culé. Calidad para ello tienen, ya que hombres de la calidad de los Márquez, Milito, Touré, Iniesta, Bojan, Messi, Eto'o o Henry son capaces de decidir cualquier partido, y aseguran para el espectador un partido espectacular frente a Ferdinand, Scholes, Giggs, Carrick, Rooney o Cristiano Ronaldo y compañia.
A.S.Roma vs. Manchester United:
La eliminatoria entre ingleses e italianos llega marcada por el recuerdo del siete a uno que el Manchetser le inflingió a la Roma en Old Traford, en el partido de vuelta de los cuartos de final de la pasada edición de la Champions League. Con el partido de ida en el Olímpico de Roma y el deseo de vendetta de los italianos, no sería de extrañar que la Roma plantease un choque a pecho descubierto, guiados por la furia y el corazón. No obstante, este deseo de pagar al United con la misma moneda, puede girarse en su contra ya que para eliminar al coloso de Ferguson, lo más beneficioso para la Roma sería plantear un partido trabado, tosco, con interrupciones constantes en el juego, para lo cual los hombres de Spalletti deberán sacar a relucir su ADN italiano y potenciar el típico juego de los equipos del Calcio en el que el oficio sobresale por encima de la vistosidad en su juego. En un partido abierto en el que el United logre imponer su ritmo de juego, la calidad de los Cristiano Ronaldo, Rooney, Giggs, Tévez y compañía, pueden desequilibrar el enfrentamiento del lado de los diablos rojos, pero por contra, en un partido "a la italiana" el United puede pasar por muchos apuros, ya que le faltan recursos para poder sacar adelante partidos en los que imponer su juego resulte más dificultoso. Sin un mediocentro consolidado -Hargreaves podría ser la solución, pero Ferguson parece preferir a Anderson, Carrick o Scholes antes que al ex del Bayern-, con un mediocampo con más recorrido que equilibrio y la falta de un punta intimidador en el juego aéreo y especialista en el juego de espaldas a portería, en el éxito del United parece ser una condición imprescindible que el equipo juegue bien e imponga su estilo de juego.
O.Lyon vs. Manchester United
Antes de empezar la próxima semana inmersos de lleno en el análisis de los partidos de ida de las eliminatorias en que participan los tres equipos españoles, hoy nos detenemos en otro de los partidos en que se verán las caras dos equipos que parten con opciones reales para pelear por el título de campeón de Europa hasta el final. En esta ocasión, la eliminatoria enfrentará a los actuales campeones de las ligas francesa y inglesa, el Olympique de Lyon y el Manchester United, en un partido gobernado por el fútbol ofensivo y alegre, basado en el juego por bandas, la combinación y la calidad individual con jugadores como Ben Arfra, Juninho, Benzema, Cristiano Ronaldo, Rooney o Tévez en los onces de ambos conjuntos. Así pues, aunque aparentemente el equipo inglés parta como favorito en las casas de apuestas, ambos equipos prometen una eliminatoria apasionante y un gran espectáculo para el espectador.